Guadalajara, Jal., El subsecretario de Derechos Humanos y Población de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, ofreció garantías de que en breve será resuelto el caso de la deportación del catedrático y periodista alemán de origen kurdo Erol Polat, a quien el 8 de abril se le impidió entrar al país en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) presuntamente porque estaba boletinado por el gobierno de Estados Unidos.
En una comunicación que Encinas tuvo con quienes invitaron a Polat a dar conferencias en instituciones educativas de Puebla y Jalisco, el funcionario federal garantizó que podrá ingresar sin problema al país, como ya lo hizo en anteriores ocasiones.
Encinas recibió las cartas de invitación que le hicieron a Polat para participar con conferencias sobre la revolución en Kurdistán y el confederalismo democrático en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades Alfonso Vélez Pliego de la Universidad Autónoma de Puebla, además de la cátedra Jorge Alonso en Guadalajara, que depende de la Universidad de Guadalajara y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social de Occidente.
“Vamos a reparar lo que sucedió”, dijo Encinas a los organizadores, a quienes garantizó que en breve habrá una respuesta formal a lo ocurrido y, sobre todo, para facilitar el regreso de Polat, quien fue deportado el 8 de abril por agentes migratorios del AICM hacia Brasil.
“EU quiere controlar todo”
Entrevistado por el sitio de internet La Comuna, Polat explicó lo que ocurrió: “En la aduana me pararon, me pidieron pasaporte, cédula. Me tuvieron esperando y después viene una persona de Migración me da un formulario de dos páginas que son regulares para quienes entran en México. Luego pidió las invitaciones, les sacaron fotos y se fue”.
Dijo que en el AICM en el cuarto al que lo enviaron había colombianos, brasileños y otros migrantes que querían ir a Estados Unidos y no los dejaban partir hacia ese destino. Todos fueron incomunicados y, en su caso, no fue informado de los motivos de su deportación y sólo fue enviado a Brasil.
“A mí como individuo me pueden parar, pero los estadunidenses pueden parar todo, no sólo personas, también empresas. No quieren que entren los chinos, por ejemplo; creo que es un problema muy grave. Estados Unidos quiere controlar todo, quien entra y quien sale”, dijo Polat en la entrevista.