Jerusalén. Israel lanzó ayer dos ataques aéreos a la franja de Gaza, en respuesta a una serie de cohetes disparados desde ese territorio controlado por el grupo islamita Hamas, en un nuevo intercambio violento en medio de las tensiones en los sitios sagrados de Jerusalén.
Los ataques israelíes acertaron el centro de Gaza después de la medianoche, indicaron testigos y fuentes de seguridad.
El primer cohete disparado desde la franja de Gaza se estrelló en un campo de la ciudad israelí de Sderot sin causar heridos, según la policía.
Horas después, otros cuatro cohetes fueron lanzados desde el enclave palestino, reportó el ejército israelí, que aseguró haberlos interceptado.
Un cohete lanzado el lunes desde Gaza también fue detenido por el escudo antimisiles israelí Cúpula de Hierro.
Tras ese lanzamiento, que no fue reivindicado, la aviación israelí bombardeó posiciones pertenecientes presuntamente a Hamas, cuyo brazo armado disparó en respuesta varios cohetes tierra-aire a los aviones israelíes, de acuerdo con autoridades de Hamas.
Las tensiones siguen siendo elevadas, en especial tras los enfrentamientos del pasado fin de semana entre manifestantes palestinos y la policía israelí en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, el tercer lugar más sagrado del Islam y el más sagrado del judaísmo bajo su nombre de Monte del Templo.
La policía israelí impidió anoche que cientos de manifestantes nacionalistas judíos se acercaran al barrio musulmán de la Ciudad Vieja de Jerusalén para evitar enfrentamientos. Entre los manifestantes estaba el diputado de extrema derecha Itamar Ben Gvir, a quien el premier Naftali Bennett prohibió entrar en la zona a primera hora del día.
Bennett, derechista y figura del movimiento de colonos israelíes, encabeza un gobierno de coalición ideológicamente diverso.
En tanto, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, manifestó su “preocupación por el deterioro de la situación en Jerusalén”.