Nueva York. La venta de boletos de avión repuntó con fuerza a pesar de los precios altos tras una desaceleración ligada a la variante ómicron del covid-19 a principios de año, con lo cual las aerolíneas estadunideses esperan volver a números positivos pese al encarecimiento del combustible derivado de la guerra en Ucrania.
Las tres grandes empresas estadunidenses del sector presentaron pérdidas en el primer trimestre del año (mil 600 millones de dólares para American Airlines, mil 400 millones para United Airlines, 940 millones para Delta Air Lines).
Sin embargo, más de dos años después del inicio de la pandemia de covid-19, la necesidad de viajar parece tentar a los pasajeros, pues en marzo American y Delta registraron ventas récord.
Sin embargo, según cifras gubernamentales, los precios de los boletos de avión comprados en Estados Unidos han aumentado considerablemente en el último tiempo, un 10.7 por ciento en marzo en comparación con febrero.
La subida permite a las empresas compensar el aumento del precio del combustible, normalmente la segunda fuente de gasto de estas empresas después del personal.
"Vimos en marzo lo que era posible con un aumento de la demanda gracias a la caída de las tasas de contagio, la relajación de las restricciones y una recuperación" de los viajeros frustrados en el punto álgido de la pandemia , señaló el nuevo director general de American, Robert Isom.
En este panorama se suma el hecho que desde el lunes pasado, tras una decisión judicial, los pasajeros ya no están obligados a usar mascarilla en los aviones dentro de Estados Unidos, lo que provocó reacciones encontradas entre los pasajeros encantados de deshacerse de ellas y otros preocupados por el riesgo de contagio.
"Las tendencias van en la dirección correcta y las aerolíneas han tomado medidas drásticas para reducir los costos durante la pandemia, pero (con el aumento de los costos) siguen ganando menos dinero por asiento que hace unos años", comentó por su parte Peter McNally, de la consultora Third Bridge.
Ante la dificultad para reclutar personal suficiente, y al no poder contar con todos los aviones previstos en su flota por contratiempos con los aviones de Boeing, las compañías se abstienen por el momento de ofrecer la misma cantidad de vuelos previos al estallido de la pandemia. Aun así, los viajes de negocios parecen recuperarse, pues American Airlines espera que las ventas generadas por este tipo de viajes vuelvan en el segundo trimestre al 90 por ciento de lo que eran antes de la pandemia, indicó Robert Isom.