Con inversión de 300 millones de pesos, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) suscribieron ayer un acuerdo marco para impulsar la investigación clínica que permita el desarrollo de nuevos fármacos y equipos médicos, así como avanzar en el conocimiento de las principales enfermedades que afectan a la población mexicana.
En conferencia de prensa para dar a conocer el acuerdo, los titulares del IMSS, Zoé Robledo, y Elena Álvarez-Buylla, del Conacyt, informaron que se desarrollan 28 proyectos, entre ellos la vacuna Patria, de la cual se prevé concluir en unos meses la fase 2 de su estudio clínico, tras confirmarse que el proyecto vacunal es seguro.
Si bien se han recibido “miles de solicitudes de voluntarios, que aún se están procesando (…) y se han cubierto todos los grupos centinelas, que se integran para corroborar la seguridad para todas las plataformas vacunales, esperamos que en pocos meses terminemos de reclutar a los voluntarios”, de los cuales se requieren 400, explicó.
Lo anterior, reconoció ha sido difícil, pues la variante ómicron y las campañas de vacunación, han elevado la cantidad de anticuerpos en la población, pues se requiere que los voluntarios tengan un nivel de anticuerpos inferior a mil 200. Indicó que se han tenido que rechazar a tres de cada cuatro solicitantes.