Buenos Aires. El presidente de la Corte Suprema argentina, Horacio Rosatti, asumió ayer al frente del Consejo de la Magistratura, organismo que evalúa el desempeño de los jueces, a través de un fallo del máximo tribunal firmada por él mismo, en un procedimiento cuestionado por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, y calificado por medios como un golpe de Estado judicial. Fernández de Kirchner cuestionó que Rosatti llegó al máximo tribunal por decreto del ex presidente Mauricio Macri (2015-2019), y ahora firme un fallo que lo nombra titular de la magistratura.