Las decenas de juicios laborales en contra de la ley de austeridad local son una bomba de tiempo para el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), cuyo Consejo General deberá resolver lo más pronto posible por la falta de presupuesto este año, aseguraron fuentes del organismo.
Mientras se suman más impugnaciones, explicaron que los trabajadores que ganan los juicios gozarán, hasta que concluyan sus contratos o renuncien, de vales de despensa, fondo de ahorro y gratificaciones de fin de año con cargo al presupuesto líquido del instituto en los próximos años.
No obstante, se seguirá toda la cadena impugnativa a fin de buscar una estrategia legal para evitar el pago de prestaciones y gratificaciones adicionales eliminadas con la entrada en vigor de la ley de austeridad de la Ciudad de México.
Explicaron que con la legislación se modificaron diversos beneficios, como seguro de gastos médicos, vales de despensa mensuales y anuales, fondo de ahorro y gratificaciones extraordinarias de fin de año, como un pavo. Si bien todo se puede impugnar, los tres últimos beneficios son los únicos que han sido exigidos ante las autoridades jurisdiccionales.
Ayer se informó que el IECM suma al menos 127 demandas por parte de sus trabajadores, quienes exigen el pago de diversas prestaciones. Hasta el momento, el Tribunal Electoral local (TECM) ha fallado a favor de los colaboradores en 99 por ciento de los casos, quienes exigen igualdad salarial con sus compañeros. Los juicios se reactivaron a partir de la conclusión del proceso electoral, en septiembre pasado, de ahí que cada semana se sumen más.
Sólo la semana pasada se interpusieron dos más que se agregan a la de los trabajadores adscritos a diversas áreas del instituto, como contraloría interna, dirección de asociaciones políticas, distritales, secretaría ejecutiva y administrativa, la unidad técnica de archivo, logística y apoyo a los órganos distritales, las unidades técnicas de asuntos jurídicos, de género y derechos humanos, de servicios informáticos y vinculación, entre otros.
En caso de no contar con recursos suficientes para pagar, el IECM podría solicitar un requerimiento presupuestal extraordinario ante el Congreso de la Ciudad de México, indicaron las fuentes.