Ciudad de México. Después de dos años de virtualidad y de participaciones presenciales reducidas, debido a la pandemia, esta mañana se realizó en la Catedral Metropolitana, la misa crismal con un aforo abundante de fieles y sacerdotes.
En el denominado día del sacerdote, el cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México aseguró que “el lugar de todo sacerdote está en medio de la gente”, en la “cercanía con el pueblo”, exaltó la “fraternidad sacerdotal, y dejó en claro que cuando hay lazos de auténtica amistad, también es posible vivir con más serenidad la elección del celibato”.
Tras calificar al celibato como un don, dijo que “para ser vivido como santificación requiere de relaciones sanas, vínculos de auténtica estima y genuina bondad” y advirtió que que “sin amigos y sin oración, el celibato puede convertirse en un peso insoportable y en un anti testimonio de la hermosura misma del sacerdocio”.
También durante el momento en que los feligreses y religiosos se desean paz, pidió porque cesen los conflictos armados, en relación a la situación en Ucrania, aunque no lo mencionó directamente.
En una Catedral, también hubo presencia de religiosas y de algunos políticos como la diputada Margarita Zavala, quien ocupó un lugar cercano a los oficiantes de una de las conmemoraciones de Semana Santa en la que se bendice el Crisma.
#VideosLaJornada Tras dos años de virtualidad y participación presencial reducida
— La Jornada (@lajornadaonline) April 14, 2022
debido al #covid-19, este #JuevesSanto se celebró la #MisaCrismal
en la #CatedralMetropolitana, que
contó con gran aforo de asistentes.
Video e información: Carolina Gómezhttps://t.co/XPcfrmODGk pic.twitter.com/JUbxxu8bxe
Todos los asistentes portaron cubrebocas, y solo había tres personas por banca. Al ingreso se otorgó gel y se tomó temperatura y en unas pequeñas pantallas se recordaba las medidas sanitarias para evitar el contagio de covid-19.
Incluso tras la celebración religiosa se realizó el, hasta previo a la pandemia, tradicional convivio en honor a los sacerdotes en su día.
En un costado de una de las salidas de la Catedral estaban dispuestas mesas para el ágape al aire libre, mientras personal preparaba los canapés. Se veían brochetas, cubitos de jamón, queso y aceitunas, entre otros alimentos, además se haría un brindis en honor de los conmemorados.
Los feligreses estaban felices de poder retomar la Semana Santa de forma similar a lo que era previo a la pandemia.
Patricia Ramírez y Leticia Rivera, dijeron a La Jornada que “en dos años no habíamos venido en esta celebración. Hay que darle gracias a Dios”, por venir nuevamente a esta conmemoraciones litúrgicas “después de este covid-19, y de estarnos guardando tanto tiempo, eso es una gracia.
“Es una bendición de Dios, porque tanta gente no está, porque muchos murieron” y destacaron las medidas de protección: “cubrebocas, tomaron temperatura y nos dieron gel y por banca solo tres personas. Hubo sana distancia, en lo que se pudo”.
Venimos a “darle gracias a Dios, porque es una gracia ir retomando poco a poco todo lo que el Señor nos regala día con día, especialmente darle gracias por el don de la vida”. Dijeron que para el resto de las conmemoraciones religiosas de Semana Santa “iremos a nuestras parroquias, en Tlalpan”.
Otra feligresa que omitió su nombre comentó a este medio que volver a las ceremonias se Semana Santa “fue muy bonito, así fuera siempre el seguir viniendo” y agradeció la regia que da el SARS-CoV-2, que “nos da esta oportunidad de venir a ver a nuestro Señor. No había venido ni en 2020 ni en 2021 por la pandemia”.
Rosario, también dijo que “no había venido por la pandemia” y celebró “venirle a dar gracias a Dios, porque aquí seguimos pese a todo lo que ha pasado”.
Aguiar Retes exhortó a los religiosos “a expresar la renovación de nuestros compromisos sacerdotales desde el corazón, lugar íntimo donde Dios habla y mueve a nuestro espíritu para descubrir su presencia y llegar a ser testigos fieles de Jesucristo y hacer presente el Reino de Dios en nuestro tiempo y en nuestra querida Arquidiócesis Primada de México. ¡Que así sea!”
Hoy a las 17 horas en la Catedral Metropolitana se realizará la misa la Cena del Señor.
Mañana, Viernes Santo, a las 17 horas será la Liturgia de la Pasión del Señor.
El sábado 16 de abril, a las 20 horas será la Vigilia Pascual en la Basílica de Guadalupe
El 17 de abril, Domingo de Resurrección
A mediodía se realizará la misa de Resurrección en la Catedral Metropolitana.
La Semana Santa inicia con la celebración del Domingo de Ramos de la Pasión del Señor, que fue el domingo pasado, día en que se recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén.
El Jueves Santo, hoy, se conmemora la institución de la eucaristía por Jesús durante la Última Cena, el establecimiento del sacerdocio ministerial, y el lavatorio de pies, “ritual con el que Jesús enseñó el amor y servicio”.
El Viernes Santo, mañana “es un día de reflexión en el que se acompaña espiritualmente a Jesús en su Pasión y muerte, en algunas parroquias se organiza el viacrucis mediante el cual se busca acompañar a Jesús hacia el Calvario”.
El Sábado Santo es el tercer día del Triduo Pascual y es un día de luto porque Jesús está en el supulcro.
Finalmente, la Semana Santa concluye con el Domingo de Resurrección o Fiesta de la Pascua, día en que “la iglesia invita a todos los fieles a ser partícipes de la emoción, alegría que tuvieron los discípulos de Jesús al darse cuenta de su resurrección”.