El repunte en las manufacturas no fue suficiente para contrarrestar las caídas en la minería y la construcción durante febrero, cuando, en suma, la actividad industrial en México cayó por primera ocasión en cinco meses.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que el Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI) se redujo uno por ciento respecto a enero, debido a la baja en tres de sus cuatro componentes, mientras a tasa anual registró un avance de 2.5 por ciento.
El IMAI se ubicó en 100.2 puntos, lo cual implica que la actividad industrial del país está 1.5 por ciento por debajo de su nivel prepandemia (febrero de 2020).
La minería se desplomó 6.6 por ciento respecto a enero; la construcción descendió 1.5 por ciento; la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final cayeron 0.5 por ciento; mientras, por el contrario, las industrias manufactureras avanzaron 0.6 por ciento.
Ricardo Aguilar, economista en jefe de Invex, explicó que la caída de la construcción fue reflejo de los retrocesos, tanto en edificación (0.7 por ciento mensual) como en obras de ingeniería civil (4.4 por ciento). En promedio, esta actividad ha descendido uno por ciento mensual desde septiembre del año pasado.
“La construcción podría permanecer deprimida durante los próximos meses. Para impulsar a este sector será importante reforzar los acuerdos de inversión en infraestructura entre los sectores público y privado. Probablemente sería más importante aún ofrecer condiciones suficientemente sólidas en el ámbito legal para que el sector privado pueda invertir confiadamente”, aseveró Aguilar.
Francisco Flores, director de economía nacional de Banorte, sostuvo que el desempeño de la manufactura fue apuntalado por la demanda en Estados Unidos, otras tendencias globales y mejores condiciones epidemiológicas.
En el avance de este sector destacan bebidas y tabaco; impresión e industrias conexas; así como la fabricación de equipos metálicos; de prendas de vestir y de productos derivados del petróleo y del carbón.
A tasa anual y con series desestacionalizadas, el IMAI incrementó 2.5 por ciento en términos reales en febrero pasado. Por sector de actividad económica, la construcción registró una caída de 4.0 por ciento en febrero con respecto al mismo mes de 2021; la minería retrocedió 2.9 por ciento. Por su parte, la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final avanzaron 4.2 por ciento y las industrias manufactureras subieron 6.9 por ciento en el periodo de referencia.