La empresa Panasonic Automotive Systems, ubicada en Reynosa, Tamaulipas, “impuso” un contrato colectivo de trabajo de protección a sus trabajadores, que firmó con un sindicato cetemista, lo que representa una violación a la legislación laboral y a los acuerdos del T-MEC en la materia, aseguraron la asesora laboral, Susana Prieto Terrazas, así como empleados de la compañía.
Por lo anterior, al menos mil trabajadores llevan cinco días de paro laboral, debido a que –señalaron– les siguen descontado la cuota sindical, además de que la empresa firmó con el Sindicato Industrial Autónomo de Operarios en General de Maquiladoras de la República Mexicana (Siamarm), de Alberto Lara Bazaldúa, un contrato colectivo “que no conocemos ni hemos revisado”.
Prieto Terrazas, también diputada federal de Morena, anunció que interpondrán una queja por violaciones al acuerdo comercial, al impedir la libertad sindical que establecen el capítulo 23 del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la Ley Federal del Trabajo.
“La empresa les impuso un sindicato y un contrato colectivo cuando no ha habido un recuento; claramente están violando sus derechos cuando no se les ha permitido elegir”, apuntó Rosario Moreno, secretaria general del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de Industrias, Movimiento 20/32 (Snitis), uno de los dos gremios interesados en representar a los obreros.
Como establece la reforma laboral, para negociar con la empresa la firma de un nuevo contrato es necesario realizar un proceso de votación en el que se debe definir qué organización sindical obtiene la constancia de representatividad, documento indispensable que otorga el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL).
En septiembre de 2021, los obreros realizaron su proceso de legitimación y 888 decidieron no avalar el contrato colectivo que ostentaba, también, un sindicato afiliado a la Confederación de Trabajadores de México.
“Estamos esperando que nos den la fecha para el recuento y saber quién gana la constancia; ese documento es la base para emplazar a huelga por firma de contrato laboral”, subrayó Prieto Terrazas. Añadió que el Siamarm depositó el contrato ante la Junta Local de Conciliación, pero “esta autoridad ya no es competente” para el procedimiento, sino que corresponde al CFCRL.
Trabajadores entrevistados, que solicitaron reservar su nombre por temor a represalias, denunciaron que ayer se intensificaron las amenazas de despedirlos si no se afilian al sindicato cetemista.