Toluca, Mex., Siete meses después del deslave en el cerro del Chiquihuite, donde murieron cuatro personas, el pleno del Congreso mexiquense autorizó ayer por unanimidad al ayuntamiento de Tlalnepantla donar un predio al gobierno federal para la construcción de siete edificios con el fin de reubicar a 350 familias damnificadas.
El terreno de más de 40 mil metros cuadrados será entregado en los próximos días al Instituto Nacional de Suelo Sustentable, dependiente de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), que será el encargado de edificar las viviendas.
Un grupo de especialistas de Protección Civil de la Federación y del estado decretó que más de un centenar de viviendas ubicadas en la segunda sección de la colonia Lázaro Cárdenas, en el cerro del Chiquihuite, estaban en zona de alto riesgo por la posibilidad del desprendimiento de más rocas.
A lo largo de cuatro meses, la pasada administración de Tlalnepantla, encabezada por el morenista Raciel Pérez (2019-2021) y desde enero por el priísta Antonio Rodríguez Hurtado (2022-2024), buscó predios y determinó que el más apto se ubica en la colonia Colinas de San José.
De acuerdo con el proyecto inicial, ahí se construirán al menos siete edificios con viviendas de 63 metros cuadrados. Se pretende que este mismo año se entreguen las primeras casas y toda la obra se concluya, a más tardar, en abril próximo.
La inversión para los edificios correrá a cargo de la Sedatu, que destinará en una primera etapa 40 millones de pesos, pero se planea dirigir más de 300 millones en el proyecto.