Moscú. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, calificó ayer de “provocación grosera y cínica” de las autoridades ucranias el descubrimiento de cadáveres de civiles en la ciudad de Bucha tras la retirada de las fuerzas rusas, en su primer pronunciamiento sobre este caso que provocó condenas de la comunidad internacional.

Putin manifestó su indignación durante una entrevista con el premier húngaro, Viktor Orban.

Mientras, el ministerio ruso de Defensa abogó por involucrar a organizaciones internacionales de derechos humanos en la investigación de la “provocación cínica” en Bucha.

El jefe del Centro Nacional de Gestión de la Defensa de Rusia, coronel Mijail Mizintsev, denunció que nacionalistas ucranios bombardearon la ciudad de Dergachi, en la provincia de Járkov, y grabaron destrucciones, así como “numerosos muertos”, para entregar estas imágenes a medios de Occidente. Aseguró que “a todos los participantes en las grabaciones escenificadas entre la población civil les pagaron 25 dólares”, informó Russia Today.

“Sabemos con certeza que el régimen de Kiev, además, prepara nuevos materiales provocativos sobre la muerte de población civil supuestamente como resultado de las acciones del ejército ruso”, declaró Mizintsev. Añadió que los preparativos para escenificar ataques rusos contra civiles se completaron en las ciudades de Konotop y Trostianets, de la provincia de Sumy, y en las localidades de Borodianka y Katiuzhanka, de la provincia de Kiev. En ese contexto, destacó que “el escenario, similar al de Bucha, con acusaciones infundadas contras las fuerzas armadas de Rusia, no funcionará esta vez”.

La portavoz de la diplomacia rusa, Maria Zajárova, acusó a líderes occidentales de “emitir un veredicto de ‘culpable’ contra nuestro país sin siquiera intentar verificar los hechos”.

Añadió que “esta falsificación criminal fue inventada para justificar el próximo paquete de sanciones” contra Moscú, tras calificar a los medios de comunicación occidentales de “cómplices”. Según ella, la parte ucrania ejecutó a civiles en Bucha o bien transportó cadáveres para su puesta en escena.

Las imágenes de cuerpos esparcidos por la ciudad ucrania de Bucha, que según Rusia fueron escenificadas, están destinadas a justificar más sanciones contra Moscú y a hacer fracasar las conversaciones de paz con Kiev, afirmó Zajárova

El presidente de Ucrania, Volodymir Zelensky, denunció que “todos” los políticos y militares de Rusia “son criminales de guerra”.

“El ejército ruso, la dirección política rusa, todos los que desarrollaron esta ‘operación’, los que dieron las órdenes y los que las ejecutaron, todos son criminales de guerra”, denunció Zelensky en una entrevista para la cadena turca Haberturk, informó la agencia Ukrinform.

Al preguntarle si Putin debería ser condenado por estos crímenes, el mandatario ucranio enfatizó que el castigo por lo ocurrido en Ucrania no debería recaer sólo sobre una persona, pues considera que el abuso sobre la ciudadanía ucrania es un crimen masivo. “Todos deben rendir cuentas”, zanjó Zelensky.

Ucrania instó ayer a los habitantes del este del país a evacuar la región “ahora”, en medio de los temores de una ofensiva del ejército ruso en el Donbás, objetivo prioritario del Kremlin. En tanto, la ciudad industrial de Severodonetsk, en el este, fue blanco de ataques de obuses y cohetes.

Por otra parte, Zelensky ordenó al gobierno formalizar el cese del comercio de Ucrania con Rusia, indicó ayer el servicio de prensa presidencial en una declaración. De hecho, las operaciones de importación y exportación entre Ucrania y Rusia fueron dadas por terminadas completamente desde el inicio del conflicto, añadió la declaración.

Cuando los ministros de Exteriores del G7 y la OTAN se congregan en Bruselas para una reunión de emergencia sobre la guerra Rusia-Ucrania, el ministro de Exteriores de Ucrania Dmytro Kuleba llama a los aliados a proporcionar armas para reforzar el esfuerzo militar. Infografía Graphic News.