Chimalhuacán, Méx. Más de 70 colectivos feministas por la lucha de igualdad de género, repudiaron la agresión que sufrieron madres de víctimas de feminicidio cuando la madrugada del domingo fue desalojado, en forma violenta, un plantón que mantenían fuera de la sede local de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
En un desplegado enviado a los gobiernos federal y estatal, así como a otras dependencias y a las comisiones de derechos humanos, las firmantes condenaron la violencia, que aseguran, ejercieron más de 200 policías en contra de una veintena de protestantes.
La madrugada del domingo, policías vestidos de civil reventaron una negociación que las madres emblemáticas de la lucha contra el feminicidio y la violencia de género, sostenían con la propia fiscal en la materia.
En el llamado donde se convoca a todas las feministas del país y del mundo, se condenó el atropello en contra de Irinea Buendía y Lidia Florencio, quienes llevan varios años encabezado la causa a lo largo y ancho del territorio mexiquense.
Responsabilizaron de los hechos a Dilcya Samantha García Espinoza de los Monteros, titular de la Fiscalía que investiga los delitos de violencia de género.
También, señalaron a la fiscal regional María Esther Nolasco Núñez y a la propia alcaldesa de Chimalhuacán, Xóchitl Flores Jiménez.
Las activistas exigieron la renuncia de las funcionarias de la FGJEM, de los mandos policíacos estatales y municipales, y sanción en contra de la presidenta municipal, quien ostenta un cargo de elección popular.
También demandaron protección cautelar para Irene Martínez quien ha sido víctima de acoso por mantener su denuncia al asegurar que policías de Chimalhuacán violaron a su hija, hace dos años, cuando esta tenía 12 años de edad.
Irene fue detenida la noche del viernes acusada de manejar una motoneta con reporte de robo. Aunque se demostró que el delito no existía, la madre fue detenida y golpeada por la policía.
Lidia Florencio e Irinea Buendía, quienes llevan años luchando por justicia para sus hijas y otras víctimas de feminicidio y violencia de género, en protesta instalaron un plantón en apoyo a Irene, hasta que la madrugada del domingo, fueron desalojadas violentamente de la explanada de la FGJEM y de la propia avenida Nezahualcóyotl, donde estaban las casas de campaña.