Sao Paulo. Los banqueros latinoamericanos esperan que los inversores pasen por alto las preocupaciones políticas en la región este año y sigan invirtiendo en empresas locales, animados por los fuertes precios de las materias primas y una cómoda distancia de los riesgos geopolíticos del este de Europa.
El volumen de fusiones y adquisiciones en la región cayó 30 por ciento en el primer trimestre respecto al año anterior, mientras que las ofertas de acciones bajaron 69 por ciento, con el aumento de las tasas de interés y la volatilidad de los mercados perjudicando a ambos frentes, dijeron banqueros y abogados.
“La volatilidad de los mercados afectó a las valoraciones y retrasó las operaciones”, señaló Felipe Bittencourt, director de asesoría de Vinci Partners. Agregó que espera un menor volumen de fusiones y adquisiciones y de emisiones de acciones en la región este año, ya que el aumento de los tipos de interés eleva las tasas de rendimiento requeridas para el capital invertido en las empresas.
Sin embargo, varios asesores de operaciones consideran que la oportunidad de obtener rendimientos lejos de la guerra que sacude a Ucrania y sus vecinos ha mantenido a los inversores interesados en los mercados latinoamericanos. Los banqueros ven un flujo creciente de acuerdos entre las empresas de salud, energía y tecnología, incluyendo las fintechs.
“A pesar de los recientes problemas en Europa y de nuestras próximas elecciones, la confianza corporativa y de los inversores sigue siendo positiva. Deberíamos tener más operaciones”, afirmó Luiz Muniz, socio y director de América Latina de Rothschild & Co y quien reside en Brasil.
Señaló que un acuerdo en el sector de la salud vuelve a encabezar la clasificación regional: la cadena de hospitales SA Rede D'Or Sao Luiz SA pactó en febrero adquirir la aseguradora Sul America SA por 13 mil millones de reales (dos mil 810 millones de dólares).
Otro acontecimiento destacado del primer trimestre fue la reestructuración de la aerolínea Aeroméxico, en la que Apollo Global Management se convirtió en el mayor accionista junto con Delta Air Lines.
Los banqueros esperan que las elecciones presidenciales en Brasil, la mayor economía de la región, no resten impulso, ya que el expresidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, quien ahora lidera las encuestas, ha elegido como compañero de fórmula al centrista Geraldo Alckmin, lo que indica una coalición con políticas económicas moderadas.
La caída de las nuevas emisiones de acciones en el último trimestre fue consecuencia de un retroceso mundial, ya que las tasas de interés subieron en Estados Unidos y en los países latinoamericanos.
Los analistas ven obstáculos para las ofertas públicas iniciales (OPI), pero un rebote más fácil para las ofertas de seguimiento, que dominaron las emisiones del primer trimestre. Las empresas de energía y materias primas, como el holding energético Equatorial Energia SA y el procesador de alimentos BRF SA, fueron algunas de las mayores emisiones.
“Los clientes esperan mayores descuentos en las ofertas de acciones, ya que los inversores son más cautelosos”, dijo Pedro Juliano, jefe de banca de inversión en Brasil de JPMorgan Chase & Co.
Aunque se acercan las elecciones de octubre en Brasil, los inversores esperan que el gobierno siga presionando para privatizar la empresa eléctrica Centrais Eletricas Brasileiras SA, o Eletrobras, en una operación cercana a los 15 mil millones de dólares.