Ciudad Victoria, Tamps., Agricultores de nueve ejidos del municipio de Jaumave exigen a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que les reconozca los derechos que tienen desde hace 80 años sobre el agua de la región, pues las concesiones otorgadas a empresarios limoneros desde 2012 han provocado escasez del líquido.
El pasado 9 de febrero los campesinos denunciaron que, con apoyo de funcionarios estatales y federales, productores de limón italiano de la zona habían instalado represas en el río Guayalejo y con ello los dejaron sin agua para regar sus cultivos; ante esto, decidieron quitar los costales de tierra que no permitían que fluyera el recurso natural y se pusieron “en alerta”.
A finales del mismo mes, la Conagua suspendió el riego en cientos de hectáreas de siembra de limón italiano tras detectar irregularidades en las tomas y estaciones de bombeo.
No obstante, ahora la situación se encuentra indefinida y los labriegos solicitan a la dependencia federal que les dé a conocer las acciones que proceden.
Por el momento, los ejidatarios vigilan que los propietarios de los limonares no extraigan agua de un punto conocido como la Poza Azul.
Pedro Luna Reyes, presidente de la Asociación de Usuarios del Canal Común Guayalejo, explicó que la Conagua ya hizo una revisión respecto del volumen del cauce y con base en éste elaboraría un estudio para determinar la cantidad de líquido que corresponde a cada población, pero los resultados aún no se han dado a conocer.
Señaló que los habitantes de los ejidos Matías García, Gustavo Cáceres, Jaumave, San Juanito, El Ingenio, El Alamito, Padrón y Juárez, San Lorencito y San Vicente están “desesperados” porque la autoridad federal no ha sido clara en delimitar los derechos del agua en dicha región, los cuales consideran que les corresponden porque heredaron ese territorio, junto con todos sus recursos, de sus padres y abuelos.
Recordó que este reclamo se inició hace nueve años, cuando fueron entregadas concesiones a particulares que rentaron predios en el ejido Monterredondo, donde hicieron plantíos de limón italiano que actualmente abarcan más de 400 hectáreas.
Desde entonces, detalló, los demás poblados comenzaron a sufrir la falta de agua para sus cultivos de maíz, caña, aguacate y calabaza; incluso aseguró que en los últimos años hay desabasto para uso doméstico.
“Por eso, desde hace dos meses los ejidatarios y pobladores decidieron liberar el cauce y vigilarlo, para que llegue el agua a sus localidades y satisfacer la demanda”, recalcó.