Hay una nueva forma de estafar a los clientes de la banca. Supuestos trabajadores de una institución financiera llaman a los cuentahabientes para decirles que sus recursos están expuestos y son vulnerados, motivo por el que piden transferir todo su dinero a otra entidad bancaria, reveló Marcos Arturo Rosales García, director de prevención de fraudes de Santander México.
En una entrevista con La Jornada, el directivo explicó que, actualmente, los defraudadores buscan como principal objetivo robar los datos de las cuentas digitales. Otra amenaza que se ha detectado son códigos maliciosos para tomar el acceso de las computadoras de los clientes del banco.
“Hemos identificado casos en los que los defraudadores llaman al cliente y le dicen que sus recursos están en riesgo porque su cuenta fue comprometida y para protegerlos, les dicen que deben transferirlos a otra cuenta que además es de otro banco. Engañan a los clientes de tal forma que el mismo usuario transfiere sus recursos”, señaló.
Al mismo tiempo, alertó Rosales García, la institución tiene identificado un código malicioso, llamado malware, el cual permite a los ciberdelincuentes tomar el control de sus dispositivos electrónicos, principalmente, computadoras.
“Otra cosa que está creciendo es el malware, son códigos maliciosos que se distribuyen y le brinda al defraudador la capacidad de tomar control de las computadoras (de los usuarios del banco) y de ahí tomar control de sus operaciones, roba la sesión del cliente cuando ya ingresó a la banca electrónica, dan de alta cuentas y hacen transferencias.”
A decir del especialista, las medidas de aislamiento social y la facilidad para enmascarar un correo, llamada o un mensaje de texto provocó que los defraudadores de la llamada “ingeniería social” tuvieran un crecimiento exponencial.
“Los defraudadores dejaron de hacer otras cosas y crecieron en el aislamiento, estuvieron contactando permanentemente a nuestros clientes. Además, enmascaran su identidad porque es sencillo, descargas una aplicación y puedes poner como quieres que salga la llamada en el otro número o creas un correo falso”, mencionó.
Para ello, apuntó Rosales García, el banco ha puesto en marcha diversos mecanismos de seguridad, tales como las tarjetas sin números o cien por ciento digitales.
“En la parte de tarjetas, en los últimos dos años hemos tenido una reducción de entre 40 y 50 por ciento en los fraudes desde la implementación de tarjetas sin número, digitales y sin contacto y las tarjetas que nacen 100 por ciento digitales en la aplicación”, expresó.
Rosales García también señaló que un nuevo mecanismo en el que actualmente Santander trabaja para proteger a sus clientes es por medio de la “biometría conductual”.
Se trata de un mecanismo por el cual, el banco reconoce desde qué dispositivo se conecta un cliente, con el que la conexión se hace de forma frecuente y se le denomina “de confianza”. Por este dispositivo, el banco reconoce la velocidad con la que el cliente realiza sus transacciones, escribe o incluso la posición en la que toma el aparato electrónico.
“Son sistemas de inteligencia artificial, pero ya podemos ver si un dispositivo está contaminado, si alguien tiene un control remoto. Y en la biometría conductual, mediante parámetros, vemos si alguien que entra a la banca móvil es o no por medio de cómo utiliza el dispositivo, es a donde vamos”, refirió.