Durango, Dgo., Ante la escasez de agua en el campo duranguense , a causa de la falta de aguanieve y la llegada del estiaje, la Unión Ganadera del estado llamó a sus agremiados a vender todos sus animales improductivos lo más pronto posible, antes de que éstos mueran.
Rogelio Soto Ochoa, presidente de la agrupación, vaticinó un panorama complicado para el sector en las próximas semanas, debido a que, aunado a la sequía, no ha arribado a la entidad la cantidad de granos que generalmente llegan de Rusia para alimentar el ganado.
Durango cuenta con un hato de un millón 300 mil animales, para los cuales, según Soto Ochoa, en los próximos meses no alcanzarán el líquido ni la comida, por lo que sugirió tomar dicha medida cuanto antes, porque además en este momento el precio de la carne es más alto que hace un año.
Reconoció que las lluvias que cayeron en 2021 han permitido un primer trimestre equilibrado, a diferencia de otros años, cuando las dificultades comienzan en enero.
No obstante, explicó, dichas condiciones ya no se pueden sostener porque hubo pocas precipitaciones de aguanieve, por lo que se prevé que el 15 de abril se inicie una sequía severa que afectará “buena parte” del estado.
“Por eso hacemos el llamado a los ganaderos a que aprovechen los buenos precios que todavía tienen las vacas flacas, a diferencia del 2020, cuando no las querían ni regaladas”, advirtió Soto Ochoa.
El año pasado, por la escasez de agua y alimento murieron alrededor de 50 mil cabezas de ganado, mientras que en 2020 fueron cerca de 20 mil; se prevé que este año la cifra sea menor, sobre todo si se logra restar al hato el 15 por ciento improductivo.
El presidente de la Unión Ganadera duranguense refirió que en 2022 el precio del maíz forrajero subió 36 por ciento. Expuso que una parte importante proviene de Rusia, y por el conflicto bélico entre ese país y Ucrania, no ha llegado grano a México, lo que ha provocado su encarecimiento.
No descartó que pueda elevarse más el costo conforme pasen las semanas y se agudice el estiaje.
Rogelio Soto detalló que los abrevaderos todavía tienen agua, pero ésta podría comenzar a escasear en junio; en algunas regiones la situación será aún más crítica y el ganado empezará a adelgazar de mánera más acelerada.
En tanto, la poca humedad en el suelo de la zona serrana del estado ha propiciado condiciones para que ocurran incendios forestales.
Alfredo Herrera Duenweg, secretario estatal de Recursos Naturales y Medio Ambiente, dio a conocer que este año han ocurrido 58 conflagraciones, principalmente en los municipios de Lerdo, Mezquital, San Dimas y Pueblo Nuevo, con daños en poco más de 4 mil hectáreas.