Al confirmar la neutralidad de México ante la guerra en Europa, el presidente Andrés Manuel López Obrador fundamentó: “No podemos estar a favor de ninguna invasión; condenamos la invasión de Rusia a Ucrania, condenamos todas las invasiones, pero no podemos tampoco llevar a cabo un protagonismo que vaya más allá de lo prudente para mantener nuestra neutralidad”.
Al preguntarle su opinión sobre el presidente ruso, Vladimir Putin, respondió: “Yo no califico a nadie, no es la política de México insultar a nadie, a ningún pueblo y a ningún gobierno extranjero. Tenemos mucho respeto al presidente de China (Xi Jinping); de Rusia; a (Joe) Biden, de Estados Unidos. México es respetuoso de todos los pueblos, de todos los gobiernos. Y no es colonia de Rusia ni de China ni de Estados Unidos: es un país libre, independiente, soberano”.
En cuanto a la relación de México con España, en la cual marcó “una pausa” al iniciar este año, el tabasqueño aseguró que respeta al pueblo de aquel país, pero aclaró a las autoridades y empresas que México ya no es tierra de conquista. “No actuemos como acomplejados pensando que debemos seguir rindiendo pleitesías a gobiernos extranjeros”, señaló.
En torno al conflicto bélico en el este europeo, López Obrador deseó “que se llegue a un acuerdo, que se consiga la paz, que la gente no sufra, que no se pierdan vidas humanas, es lo que deseo. Y sí hay manera de que lleguen a acuerdos, porque no sólo se trata de enfrentamientos de los pueblos, no: los pueblos siempre son ajenos a las decisiones que se toman en las cúpulas y que provocan las guerras. Es cosa de que se arreglen arriba”.
Refirió como caso de buen acuerdo el de Estados Unidos y Venezuela “después de tantas cosas que se han dicho. ¿Y por qué el arreglo? Bueno, porque por la situación de Ucrania y el aumento en los precios del petróleo, a Estados Unidos, considero, le conviene que pueda ser abastecido de petróleo de Venezuela y ya autorizaron para que una petrolera estadunidense, Chevron, pueda extraer un millón de barriles diarios de Venezuela, y esto seguramente va a ayudar en las relaciones”.
Sobre su visión de los españoles, adujo que es “un pueblo admirable, sobre todo los migrantes, que salen adelante con trabajo, como todos los migrantes del mundo, que son seres excepcionales, los migrantes mexicanos, los migrantes de cualquier país. Sin embargo, la élite en España no se ha portado bien con México y con nuestro pueblo. Primero, porque han abusado, y empresas y bancos han sacado ganancias exageradas de México, y se han metido en asuntos que sólo corresponden a los mexicanos, han hecho hasta política en México”.
En cuanto a las autoridades y las empresas españolas, “que se entienda que no se pueden cometer abusos, por eso la pausa. Esto no significa ruptura, no es que no haya relaciones con España. Es el segundo país en inversiones en México y lo va a seguir siendo, y los empresarios españoles van a tener siempre apoyo y respeto del gobierno nuestro si hay un comportamiento ético, si no se apuesta al influyentismo y a la corrupción”.