Madrid. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha alertado este jueves acerca de los peligros de banalizar a la ultraderecha y ha señalado directamente al "tándem" formado por Marine Le Pen y Éric Zemmour, a quienes ha dicho está "combatiendo".
"Nunca he banalizado al Frente Nacional", ha asegurado Macron, quien conscientemente ha utilizado el nombre original del partido que lidera Marine Le Pen, quien a su juicio, forma un "tándem de extrema derecha" con el otro candidato ultra a la Presidencia francesa, Éric Zemmour, del partido Reconquista.
"La gente la ha banalizado, ha mirado para otro lado, dice es más solidaria, así que no se sorprendan", ha dicho en referencia a Le Pen el presidente Macron durante un paseo por la ciudad costera de Fouras (oeste), informa la cadena BFMTV.
"En general, he oído menos que se trate de extrema derecha. Hace veinte años, los medios decían 'es un frente republicano terrible'. Las fuerzas políticas republicanas le decían 'nunca'. Ya no existe esa reacción", ha lamentado Macron a diez días de la primera vuelta de las elecciones presidenciales.
La respuesta de los aludidos no se ha hecho esperar y poco después Zemmour ha utilizado sus redes sociales para decir a Macron que "no hay tándem ni extrema derecha", sino "un presidente que no hace nada, no dice nada, no piensa nada y que apuesta toda su reelección a una final con Marine Le Pen".
"Soy el único capaz de lograr la unión de derechos, el único que puede vencerlo", se ha arrogado el que es por ahora, según las últimas encuestas, el cuarto candidato en intención de voto, con tan solo el 10 por ciento, muy lejos de Macron, que suma el 28 por ciento.
Por su parte, Le Pen le ha reprochado "huir del debate" y hacer "comentarios irresponsables" debido a "su falta de argumentos" sobre el proyecto "de unidad e interés nacional" que ella dice representar. "Incapaz de defender su desastroso historial, Emmanuel Macron no tiene otra medida que ofrecer a los franceses que no sea la jubilación a los 65 años", ha dicho.
Los sondeos deparan una segunda vuelta entre Macron y Le Pen, en la que el presidente galo se impondría con el 52,5 por ciento de los votos frente al 47,5 por ciento de la candidata de Agrupación Nacional, quien en las últimas semanas ha estado reduciendo la brecha que existía entre ambos.