Zacatecas, Zac. Cientos de productores agrícolas de Zacatecas se han visto afectados por graves daños en sus sistemas de riego (electrobombas, transformadores, arrancadores y reguladores) debido a las variaciones de voltaje.

Los labriegos han interpuesto más de 50 denuncias ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) contra la Comisión Federal de Electricidad, responsable del suministro.

Los campesinos explicaron que las fluctuaciones aumentaron desde que empresas privadas generadoras de energía eléctrica (eólica y solar) comenzaron a operar en el estado, lo que ha sobrecargado las líneas de transmisión.

Recordaron que sólo en un día de junio de 2020 más de 60 productores agrícolas del centro y norte de la entidad tuvieron pérdidas millonarias, pues se quemaron equipos de bombeo a causa de un pico de voltaje.

Así lo denunciaron en entrevista un grupo de agricultores, encabezados por Alberto de Santiago Murillo, presidente de la Asociación de Usuarios de Pozos de Riego de Zacatecas, organización que agrupa a más de 8 mil productores.

Según una minuta elaborada el 17 de junio de 2020, ese día representantes de los usuarios de pozos de riego y de subestaciones de pozos de alta tensión se reunieron en el predio Los Corrales, municipio de Calera, “para presentar una denuncia pública y ante las instancias correspondientes a fin de que la CFE se haga responsable del pago del daño económico”.

De los perjuicios se notificó a los directivos regionales de la empresa productiva del Estado: Luis González Beltrán, Gustavo Ortega Piña y Pablo Quirarte Macías. Sin embargo, no ha habido respuesta.

En octubre pasado los productores recurrieron a la Profeco e interpusieron denuncias, las cuales procedieron y la dependencia federal inició el proceso de conciliación. Los labriegos presentaron como pruebas documentos donde se leen las variaciones del voltaje que reciben en sus equipos de bombeo.

“Sabemos que en la CFE las líneas de transmisión ya son insuficientes para la distribución. Se está sobrecargando el sistema ¿Quién va a meter el flujo del mar en un arroyo o en un río? Simplemente esto se desborda y es un desastre”, reprochó De Santiago Murillo.

Expuso que es necesario que el gobierno “se aplique y apoyemos la reforma eléctrica para que se haga responsables a estas empresas particulares, de origen nacional o extranjero, porque están haciendo que los productores tronemos”.

En Zacatecas están en operación dos centrales eólicas: una cuyos aerogeneradores están distribuidos en los municipios de Zacatecas, Guadalupe, Genaro Codina y Villanueva, y la segunda, en el municipio de Mazapil. Una tercera está en fase de pruebas en el municipio de Pinos. Asimismo, hay cinco parques de generación solar en el centro y norte del estado.

Alberto de Santiago Murillo señaló que en Zacatecas hay directivos de nivel medio y bajo en la CFE que “parecieran estar boicoteando” a la misma empresa, “al no dar mantenimiento oportuno a las redes de transmisión e incurriendo en actos de corrupción, lo que sólo beneficia a los operadores privados”.

Consideró que estas irregularidades podrán resolverse con la reforma eléctrica impulsada por el gobierno federal: “Estamos con el presidente Andrés Manuel López Obrador, apoyamos a la 4T, su reforma eléctrica y a la Comisión Federal de Electricidad, pero a esta última hay que depurarla y restructurarla para que se acabe la corrupción y poner control a las empresas privadas, que causan los problemas”.

El presidente de la Asociación de Usuarios de Pozos de Riego de Zacatecas aseveró que desde que entraron en operación las centrales generadoras de electricidad privadas en la entidad (eólicas y solares) han tenido problemas con la alimentación de sus equipos.

“Todas estas energías supuestamente limpias sí benefician, pero sólo a ciertos grupos y empresas, tanto en el suministro como en la generación, pero a nosotros nos afectan mucho, porque están sobrecargando las líneas de distribución y se está acabando con la planta productiva, que son las unidades de riego”, alertó.

Refirió que el problema se agudizó en los últimos meses. El Congreso local abordó el problema el pasado 15 de marzo y emitió un exhorto para pedir la intervención de Manuel Bartlett, director general de la CFE, pues las empresas privadas, dijo, se deslindan del problema.

Expuso que además de la variación del suministro enfrentan el problema de la obsoleta y descuidada red de la CFE en varios municipios, lo que incluso ha provocado graves accidentes.

Uno de esos percances lo sufrió el campesino Arturo Ornelas López, quien accidentalmente tocó una línea de transmisión eléctrica caída entre las milpas, cuando se dirigía a realizar sus labores, el pasado 13 de marzo. Fue trasladado al hospital general de Zacatecas con quemaduras de segundo y tercer grados.

Represalias a productores

En Zacatecas la CFE distribuye energía eléctrica en las zonas rurales desde hace más de 60 años “pero los gobiernos neoliberales dejaron tirada la infraestructura y las líneas de transmisión de la entonces paraestatal”, acusó De Santiago Murillo.

“Es grave porque la vida útil de un aislador, un cortacircuito o un apartarrayos es de unos 10 años, siempre y cuando no existan la variaciones de voltaje, que ocurren hoy. Desde hace más de 60 años no se les da mantenimiento.”

Sostuvo que son muchos los casos de labriegos cuyos equipos se han quemado o averiado, pero “la gente no se atreve a denunciar”, porque los directivos regionales de la CFE “toman represalias contra las unidades de riego: cortan los servicios o los dan de baja. Son medidas anómalas que toma la empresa para que el usuario o los productores no se atrevan a quejarse”.

Mencionó que a pesar de las denuncias ante la Profeco, “la CFE se siente intocable”. Recordó que directivos de la empresa fueron convocados a una reunión para abordar el problema junto con los diputados locales, el pasado 2 de marzo.

Estuvieron representantes de la Profeco, la Comisión Nacional del Agua, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y otras dependencias estatales, además de campesinos de una decena de unidades de riego. “Los únicos que no acudieron fueron los superintendentes de la CFE. Le hicieron el vacío al Congreso. Ahí se ve la poca voluntad que tienen para solucionar los problemas”, concluyó.