Brasilia. Artistas refutaron ayer la determinación del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil, que decidió prohibir manifestaciones políticas durante el capítulo brasileño del festival de música Lollapalooza.

Antes de comenzar el último día del encuentro, el TSE atendió la petición del Partido Liberal, del presidente Jair Bolsonaro, y vetó actos de proselitismo electoral.

Por la presión el ministro Raul Araujo, de la corte, calificó de propaganda manifestaciones de apoyo al ex gobernante Luiz Inácio Lula da Silva de los cantantes Pabllo Vittar y Marina en el Lollapalooza, en Sao Paulo.

El TSE también estipuló una multa de un poco más de 10 mil 400 dólares en caso de que ocurran declaraciones similares. La campaña electoral comienza oficialmente el 15 de agosto.

La icónica cantante brasileña Anitta, quien con su tema Envolver ocupa el primer puesto en las listas de éxitos mundiales, ironizó en torno a la cantidad estipulada de la multa.

En la red social Twitter, la reconocida intérprete escribió: “¿Cincuenta mil? Pucha... menos un bolso. Fuera Bolsonaro”.

Otro afamado cantante nacional como Badauí, nombre artístico de Fernando Estéfano Badauí, afirmó en esa plataforma que el fallo es un ataque más a la democracia.

Invitó a sus compatriotas a que, en las elecciones de octubre, “se debe devolver a esta banda (Bolsonaro y sus seguidores) a la papelera de la historia de este país. ¡El pueblo brasileño no debe ser censurado nunca más!”

La segunda jornada de Lollapalooza, que cerró ayer, estuvo marcada por la aparición sorpresa de Anitta para cantar con la cabeza de cartel, la estrella de Estados Unidos del pop Miley Cyrus, y por críticas del público a Bolsonaro.

En el escenario Onix, en el que estuvo la carioca Clarice Falcão, se escucharon los primeros gritos de “fuera Bolsonaro”, que se repitieron a lo largo del día.

Falcão sonrió al público e hizo un coro en favor de Lula, quien lidera las encuestas rumbo a los comicios.