Yedá. El monegasco Charles Leclerc, al mando de Ferrari, realizó el mejor tiempo en los entrenamientos libres del Gran Premio de Arabia Saudita, en una jornada marcada por una serie de ataques perpetrados por los rebeldes yemenitas hutíes, uno de ellos en una instalación petrolera, a 10 kilómetros del circuito urbano de Yedá, lo que obligó a retrasar la segunda práctica.
El atentado en Yedá –uno de los 16 en distintos objetivos– no provocó víctimas, pero la humareda fue visible desde el circuito, donde se celebraban los primeros entrenamientos libres de cara a la carrera del domingo.
El campeón mundial de Red Bull, Max Verstappen, dijo incluso que podía oler el incendio mientras conducía. “Siento olor a quemado. ¿Es mi coche?”, preguntó el holandés por la radio del equipo.
Verstappen fue el segundo más veloz y el mexicano Sergio Pérez cuarto en la práctica que dominó Ferrari, con Leclerc primero y el español Carlos Sainz tercero.
Antes de la segunda tanda de entrenamientos, los jefes de las escuderías se reunieron con el director de la F1, Stefano Domenicali, para hablar de la situación, y más tarde la organización informó que tras consultar con las autoridades del país, el Gran Premio puede continuar “como está previsto”.
“Fórmula 1 está en contacto estrecho con las autoridades competentes a propósito de la situación actual. Confirmamos que la carrera puede continuar como está prevista, siguiendo de cerca la situación”, precisó la F1 en un comunicado.
La segunda sesión de ensayos, prevista por la noche, a las 20 horas locales, tuvo que retrasarse.
Las reacciones en el Gran Circo no se hicieron esperar. El austriaco Helmut Marko, asesor deportivo de Red Bull, señaló que Checo Pérez estaba más asustado que Verstappen, lo que le extrañó, dado que México “no es mucho más seguro” respecto a los ataques terroristas en Arabia.
“No nos afectó directamente. Max nos envió un mensaje de radio. Pensó que su coche estaba en llamas porque había un intenso olor a quemado. Luego comprobamos todos los datos: no era eso. Pero sí notó el olor a quemado de la explosión”, declaró Marko a la cadena Sky F1 Alemania.
“Max relajado al respecto y Pérez está un poco asustado, pero vivir en la Ciudad de México no es mucho más seguro. Tenemos la pandemia, tenemos la guerra en Europa y ahora un ataque con misiles de facto a 20 kilómetros de nosotros. Ya no es normal ni agradable”, enfatizó, y anotó que lo correcto sería continuar con el Gran Premio y confiar en los sistemas de seguridad del reino.
En lo deportivo, Leclerc, vencedor la semana pasada en Baréin en el primer Gran Premio de la temporada, marcó el mejor crono en las dos sesiones libres.
Si en la primera su mejor registro fue de 1:30.772, en la segunda rebajó el crono a 1:30.074, ya de noche, en condiciones similares a las que se disputará la carrera mañana y la sesión de clasificación de hoy.
Leclerc superó a Verstappen, campeón del mundo, en 140 milésimas, 246 respecto a Sainz, y 286 menos que Checo Pérez.
No obstante, el monegasco fue el único piloto de estos cuatro que rodó con neumáticos blandos, y por tanto más ventajosos a la hora de marcar un buen tiempo.
Los dos pilotos de Ferrari acortaron la segunda tanda de prácticas tras tocar ambos los muros del circuito y dañar sus monoplazas.
Los Mercedes de los británicos Lewis Hamilton y George Russell acabaron con el sexto mejor tiempo, a 439 y 590 milésimas de Leclerc, respectivamente.
Abrir conciencias
Los atentados de ayer no son el único tema extradeportivo del que se habló en el paddock. Hamilton volvió a reiterar sus quejas por tener que correr en un país donde no se respetan los derechos humanos.
Hace dos semanas, el 12 de marzo, 81 personas fueron ejecutadas en Arabia Saudita, y 16 más, según la ONG Reprieve. Se trató de la ejecución en masa más grande en la historia moderna del reino.
“Es asombroso escuchar estas historias. Oí que recibí una car-ta de alguien de 14 años condenado a muerte”, dijo Hamilton. “Mi posición es la misma que cuando hablé de esto el año pasado” y reiteró que no está “cómodo” corriendo en Arabia Saudita, donde ganó el primer Gran Premio celebrado en este país, en diciembre pasado.
“El deporte ha tomado la decisión de estar acá y tanto si es correc-to o no, creo que mientras estemos aquí es importante que tratemos de abrir conciencias”, añadió.
El australiano Daniel Ricciardo (McLaren) señaló que los pilotos pueden tratar de promover cambios reuniéndose con la gente de cada país. “Si hablar con un grupo de personas ayuda en algo, no veo por qué no hacerlo. Estamos conscientes de algunas cosas que pasan aquí. Viniendo pode-mos promover cambios y tener una influencia positiva, lo que no sucedería si no venimos”.
La F1 suspendió la carrera en Rusia este mes tras la intervención en Ucrania. Sebastian Vettel, cuatro veces campeón mundial, afirmó que no hubiera corrido allí de haberse realizado la prueba. El alemán siguió positivo al covid-19 y no correrá este Gran Premio.
“No se pueden ignorar los hechos”, afirmó Russel (Mercedes). “Espero que concienticemos un poco a la gente. Podemos tener un impacto positivo a la larga”.
Agotados, los boletos para el GP de México
La organización del Gran Premio de la Ciudad de México, a disputarse del 28 al 30 de noviembre, reportó la venta total de entradas al autódromo Hermanos Rodríguez, que inició el lunes pasado.
Este 2022 se cumplen 60 años desde que la Formula 1 llegó a México. Desde 1962 se han disputado 23 ediciones del Gran Premio de México, y seis pilotos tricolores han llegado a la máxima categoría.