Emilio Zebadúa González, oficial mayor de las secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, así como sus hermanos José Ramón y Lourdes, son investigados por la Fiscalía General de la República (FGR) por enriquecimiento ilícito.
Funcionarios federales revelaron que en caso de acreditarse la obtención ilícita de propiedades y de decenas de millones de pesos, aunque ya sea testigo colaborador en la llamada estafa maestra, Zebadúa González no tendrá inmunidad en las indagatorias en curso.
Las autoridades entrevistadas confirmaron que el ex funcionario llegó a un acuerdo con el cual se convirtió en testigo colaborador en las investigaciones relacionadas con el desvío de más de 5 mil millones de pesos de los recursos destinados a Sedesol y Sedatu cuando él estuvo bajo las órdenes de Rosario Robles Berlanga.
Debido a ese acuerdo, no ha sido imputado por los delitos de ejercicio indebido del servicio público, al igual que la ex secretaria Robles Berlanga, ni en las más de 17 investigaciones en curso por las que la FGR ha solicitado órdenes de captura contra ex funcionarios de universidades estatales y representantes de empresas que simularon operaciones con los contratos firmados.
Sin embargo, existen tres denuncias en su contra presentadas por la Auditoría Superior de la Federación y la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda tras haber detectado que los ingresos reportados en sus declaraciones patrimoniales no corresponden a los recursos registrados en diversas operaciones bancarias y en la adquisición de bienes inmuebles durante su gestión, de 2012 a 2018.
Las autoridades entrevistadas refirieron que el resultado de las carpetas y su posible judicialización no está negociado en el acuerdo de testigo colaborador de Emilio Zebadúa González en la indagatoria de la estafa maestra, por lo que él y sus hermanos, quienes se beneficiaron de los desvíos de recursos realizados entre 2012 y 2018, tampoco podrán eludir su procesamiento judicial.