Pekín. Estados Unidos debe explicar de manera convincente sus actividades militares biológicas en Ucrania y en todo el mundo lo antes posible, exigió ayer el vocero de la cancillería de China, Wang Wenbin.
Sostuvo que la comunidad internacional tiene grandes preocupaciones sobre el propósito de la investigación estadunidense en los laboratorios biológicos en Ucrania y sobre si el país realizó investigaciones peligrosas –prohibidas en Estados Unidos– en sus instalaciones en el extranjero.
Wang señaló que la parte estadunidense no puede permanecer en silencio o simplemente evadir alegando que los informes relevantes son “desinformación”.
La mejor manera de que el gobierno de Joe Biden demuestre su inocencia “es abrir sus puertas y permitir que la comunidad internacional realice una revisión”, e instó a Washington a ser franco sobre sus actividades militares biológicas y dejar de bloquear la construcción del protocolo de verificación de la Convención de Armas Biológicas.
Wu Qian, portavoz del Ministerio de Defensa Nacional de China, afirmó que la acusación de que Pekín envió ayuda militar a Moscú no es más que pura invención. El rumor propagado repetidamente por Washington deja al descubierto su “siniestra intención”, expuso.
El gobierno chino denuncia calumnias
“Instamos a la parte estadunidense a cesar de inmediato estas calumnias despreciables y a hacer algunas reflexiones profundas sobre su vergonzoso papel en la evolución de la crisis ucrania”, refirió Wu, quien añadió que la Casa Blanca debe emprender acciones concretas para impulsar que se revierta la tendencia bélica entre Moscú y Kiev.
En Bruselas, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) llamó a China y otros estados a que se abstengan de apoyar la operación especial militar rusa en Ucrania, según un documento publicado en la página web oficial de la alianza.
“Hacemos un llamado a todos los Estados, incluida la República Popular China, a respetar el orden internacional, como los principios de soberanía e integridad territorial, consagrados en la Carta de Naciones Unidas, y abstenerse de apoyar el esfuerzo bélico de Rusia o de cualquier acción que ayude a esa nación a eludir las sanciones”, alude el documento.
Añade que la alianza está preocupada por los recientes comentarios de funcionarios de la nación asiática. “Pedimos a China que deje de amplificar las narrativas falsas del Kremlin, en particular sobre la guerra y la organización atlántica, y que promueva una resolución pacífica del conflicto”.