Antes de que el juzgado 12 de distrito defina si retira la suspensión de operaciones a una megagranja porcícola en el municipio de Homún, Yucatán, organizaciones no gubernamentales entregaron a esa instancia alrededor de 181 mil firmas contra el proyecto, que afecta fuentes de abasto de agua, cenotes, selva y a la población.

El pasado 3 de marzo el tribunal colegiado en materias de trabajo y administrativa del decimocuarto distrito desestimó las quejas presentadas por niños mayas de Homún contra las violaciones a la suspensión definitiva de actividades de la megagranja.

Ahora el juez Rogelio Leal Mota resolverá el caso con base en un documento emitido por la Secretaría de Desarrollo Sustentable en el que se asegura que la planta de tratamiento de aguas residuales del recinto está lista para funcionar, informaron en un comunicado las agrupaciones Kanan ts’ono’ot (Guardianes de los Cenotes), Indignación, Greenpeace México y representantes de la infancia de Homún.

Ante el riesgo de que la planta reanude operaciones y ponga en riesgo el medio ambiente de Homún, los activistas recabaron en forma virtual las firmas y exigieron a las autoridades “que no se construyan más granjas ni se amplíen las que existen hasta que se realice un estudio que evalúe su impacto ambiental y se garantice la protección de los derechos humanos de las comunidades mayas”.