Kabul. Las adolescentes afganas volvieron este miércoles a los colegios de secundaria siete meses después de que los talibanes tomaran el poder; pero, pocas horas después de reanudadas las clases, los dirigentes islamitas volvieron a mandarlas a casa en un repentino giro de política que provocó confusión.
El Ministerio de Educación no dio ninguna explicación clara, pese a que, en la capital, las autoridades habían organizado incluso una ceremonia con motivo del inicio del nuevo curso.
"En Afganistán, sobre todo en las aldeas, las mentalidades no están preparadas", declaró a la prensa el portavoz del ministerio de Educación, Aziz Ahmad Rayan. "Tenemos algunas restricciones culturales […+ pero los principales portavoces del Emirato islámico ofrecerán aclaraciones mejores", añadió.
Según una fuente talibán entrevistada por la AFP, la decisión se habría tomado después de una reunión de altos mandatarios celebrada el martes por la noche en Kandahar (sur), cuna del movimiento islamita fundamentalista que gobierna de facto el país.
Llantos
Un equipo de la AFP estaba en el colegio Zarghona de Kabul, uno de los mayores centros de enseñanza de la capital, cuando un profesor entró y ordenó a todas volver a casa. Alicaídas, las estudiantes recogieron sus cosas entre lágrimas y marcharon.
"Veo a mis estudiantes llorar y reacias a dejar la clase", dijo Palwasha, una profesora en el colegio de mujeres Omra Khan de Kabul. "Es muy doloroso ver a tus estudiantes llorar", añadió.
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, declaró en un comunicado que "comparte la profunda frustración y decepción de las alumnas de secundaria y de las estudiantes afganas".
Bachelet consideró como algo "profundamente perjudicial" para Afganistán la "incapacidad de las autoridades de facto de respetar su compromiso".
La activista paquistaní Malala Yousafzai, galardonada con el premio Nobel de la Paz y que milita desde hace mucho tiempo por la educación de las mujeres, también expresó su indignación.
Los talibanes "seguirán encontrando excusas para impedir que las chicas aprendan, porque tienen miedo de las chicas educadas y de las mujeres autónomas", declaró Yousafzai, quien sobrevivió a un intento de asesinato de los talibanes paquistaníes cuando tenía 15 años.
Cuando los talibanes tomaron el poder en agosto, las escuelas estaban cerradas por la pandemia del covid-19, pero solo los chicos y las chicas de educación primaria pudieron retomar las clases dos meses después.
La comunidad internacional hizo del acceso de las mujeres a la escolarización un punto fundamental en las negociaciones sobre la ayuda y el reconocimiento del régimen islamita, que en su anterior mandato (1996-2001) había prohibido la educación a las mujeres.