Ciudad de México. La inflación es una de las mayores amenazas para la recuperación económica mexicana e internacional, con el potencial de socavar las ganancias que tuvo el sector bancario el año pasado, plantea Fitch Ratings.
La calificadora de riesgo explicó que episodios inflacionarios previos en México no han resultado en una demanda de crédito debilitada, pero el pico actual podría disminuir el consumo interno de individuos y empresas.
Desde marzo de 2021, la inflación ha superado la meta de Banco de México, de 3 por ciento con un rango de 1 por ciento. Alcanzó 7.37 por ciento en noviembre, su nivel más alto desde enero de 2001, y en la lectura más reciente se mantiene alta, 7.28 por ciento.
Fitch consideró que el entorno operativo para el sector bancario sigue siendo débil y una recuperación económica desacelerada podría traducirse en una menor demanda de crédito y presiones sobre la calidad de los activos, principalmente en los créditos de consumo.
Los riesgos por la inflación también puede venir del conflicto Rusia-Ucrania. "Aunque México no está directamente involucrado en el conflicto actual en Europa, Fitch cree que sus efectos exacerbarán el ya desafiante entorno operativo para los bancos mexicanos", advierte la firma de riesgo en un reporte.
"Es demasiado pronto para medir el alcance y la magnitud de los impactos que surgirán de las tensiones geopolíticas actuales o determinar hasta dónde se intensificarán. Sin embargo, la incertidumbre, las interrupciones en la cadena de suministro y la escasez de bienes y materias primas que afectarán la inflación son solo algunos de los resultados tempranos probables que retrasarán aún más los planes de inversión en México, lo que afectará la demanda de crédito y el crecimiento de los bancos mexicanos", amplió.
Por otro lado, la exposición directa de los bancos mexicanos al sector externo ha sido históricamente baja (en el último trimestre de 2021 alcanzó 1.3 por ciento de la cartera crediticia total).
Fitch expuso que todos los bancos que califica en México tuvieron ganancias anuales el año pasado. Sin embargo, la rentabilidad de algunas entidades se mantuvo por debajo de los niveles previos a la pandemia.
La firma prevé que en 2022 se mantendrán las ganancias para los bancos, debido a que las medidas sanitarias contra la pandemia de coronavirus se han relajado, mientras que cierto crecimiento económico se reflejará en las perspectivas comerciales de los bancos.
Fitch espera que las pérdidas por el deterioro de préstamos se mantengan modestas en proporción a las ganancias operativas, debido al exceso de reservas, una calidad de activos controlada, esfuerzos para aumentar las ventas cruzadas, mayor adopción digital, crecimiento enfocado en productos más rentables y aumento de las tasas de interés.
"Todos estos son factores positivos que podrían compensar los efectos de la inflación en los gastos y respaldar la rentabilidad estable esperada para los bancos mexicanos", resumió la firma de riesgo.