Jordan Poole anotó 30 unidades e impuso una marca personal con nueve asistencias, y los diezmados Warriors de Golden State encestaron los primeros 19 puntos de la segunda mitad para derrotar el 118-104 a un frustrado Heat de Miami.

Damion Lee, Jonathan Kuminga y Andrew Wiggins aportaron 22 tantos cada uno por los Guerreros. Gary Payton contribuyó con 11 unidades y Kevon Looney atrapó 16 rebotes.

Kyle Lowry encestó 26 puntos, Bam Adebayo tuvo 25, Jimmy Butler terminó con 20 y Duncan Robinson con 13 por el Heat. Miami se sobrepuso a esa enorme racha de puntos de los Warriors, un notable altercado en su propia banca durante una pausa, para tomar una breve ventaja en el cuarto periodo.

Luego, permitió que el partido se le escapara de las manos, con lo que su ventaja en la cima de la Conferencia Este se redujo a un juego y medio sobre Milwaukee y Boston.

Miami no tuvo en su alineación a Tyler Herro, quien sufrió un esguince en la rodilla izquierda, así como a Gabe Vincent, quien acusa molestias en un dedo del pie.

Los Warriors ya habían descartado a Stephen Curry por una lesión en el pie izquierdo y a Andre Iguodala por molestias lumbares. Además, Draymond Green, Otto Porter Jr. y Klay Thompson tuvieron la noche libre para evitar una sobrecarga de trabajo.

Golden State inició el tercer cuarto con una ofensiva de 19-0 en la que Jordan Poole encestó tres largos triples, dos de ellos frente a la banca del Heat para empeorar la situación.

Durante un tiempo fuera, los ánimos se caldearon en la banca de Miami. Butler y Udonis Haslem intercambiaron palabras y sus compañeros tuvieron que intervenir para separarlos. El entrenador Erik Spoelstra pareció también intercambiar opiniones con Butler.

Suns se sobreponen para vencer a Timberwolves

Deandre Ayton anotó 35 puntos, la mayor cifra en su carrera, además de capturar 14 rebotes, por unos Suns de Phoenix que se sobrepusieron para vencer por 125-116 a los Timberwolves de Minnesota en la NBA.

Devin Booker anotó 22 de sus 28 puntos en la segunda mitad. Landry Shamet aportó 19 unidades, incluidas 10 en el cuarto periodo para impulsar la remontada de los Suns, líderes de la Conferencia Oeste, que están a un triunfo propio o a una derrota de Memphis de asegurar la ventaja de locales para los playoffs.

Phoenix, que tiene una foja de 18-4 en sus últimos 22 partidos y una de 59-14 en general, cuenta con una ventaja de nueve juegos sobre los Grizzlies, cuando restan nueve por jugar.

Anthony Edwards anotó 19 puntos por Minnesota, en tanto que Karl-Anthony Towns sumó 15 unidades y 11 rebotes, pero consiguió sólo tres tantos y tres rebotes en la segunda mitad, luego de que despertó a los Suns al increparlos en la recta final del segundo cuarto.

Irving y Durant sin apoyo

En Memphis, los Nets de Brooklyn no le sacaron provecho a los 43 puntos de Kyrie Irving y a los 35 y 11 rebotes de Kevin Durant y cedieron ante los Grizzlies de Memphis con pizarra de 132-120.

El verdugo de los Nets fue Desmond Bane, quien terminó con 23 tantos pero nueve de ellos en un decisivo cuarto parcial, que los locales ganaron 29-16, ventaja decisiva para la victoria.

Aún con la prohibición de jugar partidos en casa debido a un mandato de vacunas de la ciudad de Nueva York, Irving estaba en la cancha por primera vez desde que anotó 60 puntos hace ocho días para vencer a Orlando.

Pero ese arreglo para Irving, que no está vacunado contra el covid-19, está llegando a su fin. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, está listo para levantar el mandato para atletas y artistas.

Esta vez, Memphis fue el equipo local con menos jugadores, con el máximo anotador Ja Morant fuera de juego debido a un dolor en la rodilla derecha. Pero de todos modos tuvieron suficiente ofensiva gracias al reserva De'Anthony Melton, quien igualó los 23 puntos de Bane, y Dillon Brooks, que terminó con 21 cartones.

Los Grizzlies han ganado seis de los últimos siete encuentros y son segundos en la Conferencia Oeste.

Memphis lideraba 76-62 al medio tiempo y por 15 puntos al comienzo del tercer cuarto, y Brooklyn cedió finalmente para encajar la derrota.