Zumpango, Edomex., Frente a lo que calificó como intereses creados, opuestos a la edificación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el presidente Andrés Manuel López Obrador respondió brevemente y con énfasis: “misión cumplida”.
En una jornada de reafirmación de compromisos y de evidente satisfacción, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, descartó que, con la construcción del complejo en Santa Lucía, las tareas primigenias de defensa y seguridad de nación pasaran a segundo término, “por el contrario, se están perfeccionando y reforzando en caso de necesidades para la vida institucional del país”.
Por su parte, López Obrador resaltó la obra, pues “se hizo a pesar de las resistencias de grupos de intereses creados y también de quienes quisieran que nos fuera mal, inclusive que le fuera mal al país para que se pudiese evidenciar al gobierno que represento y han llegado a excesos, a inventar cosas. Una vez estuvimos aquí en una supervisión y llegaron a decir que había sido una simulación el subirnos a un tren, que no existía el vagón del tren, y muchos lo creyeron. Decía el presidente Juárez, ayer lo recordaba yo, que a los retrógradas hay que hablarles fuerte y seguido para que escuchen, porque se cierran completamente”.
El tabasqueño dispersó agradecimientos a los ingenieros militares, a los pobladores de los municipios aledaños, a los gobiernos de Hidalgo, del estado de México, de la CDMX, a las empresas mexicanas, los proveedores. Y también respondió a las supuestas versiones de dificultad para acceder a la zona de Tecámac-Zumpango.
“El tema del acceso al aeropuerto ha sido motivo de alguna desinformación y polémica, y por eso consideramos importante dar a conocer las obras que se han realizado y que se van a seguir llevando a cabo para tener un acceso seguro, rápido, pronto, al aeropuerto Felipe Ángeles. Ya se amplió la autopista de la Ciudad de México a Pachuca a ocho carriles. Una de ellas, que va a ser muy importante, es la terminación del tren desde el aeropuerto hasta Buenavista en el tramo que falta”.
Horas después en la ceremonia oficial de entrega de la terminal aérea, el titular de la Sedena destacó que el proyecto aeroportuario se materializó en 29 meses y en conjunción con la Base Aérea Militar número 1 de Santa Lucía “representarán un complejo aeronáutico funcional que pondrá a disposición de todos los mexicanos y extranjeros una nueva plataforma aérea nacional e internacional.
“La convivencia de las dos instalaciones aéreas potencializará las funciones de ambas, permitiendo, por su parte, a la base aérea militar incrementar sus capacidades como infraestructura de apoyo y despliegue para casos de desastres naturales, arribo y salida de ayuda humanitaria internacional, así como la optimización de las operaciones militares para atender cualquier evento o contingencia de diversa índole en todo el territorio nacional.”
Esa exposición redundó en que el nuevo aeropuerto se levantó con apego a las políticas de austeridad, transparencia, honradez, eficacia y legalidad y se enmarca en la cuarta misión general de la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, que establece textualmente realizar acciones cívicas y obras sociales que tiendan al progreso del país.
Así reiteró su reconocimiento a la confianza del Presidente en la institución militar, y argumentó a favor de esa relación: “las tareas primigenias de defensa de la nación y seguridad interior no se han relegado a segundo plano por cumplir las misiones de índole social; por el contrario, se están perfeccionando y reforzando de la mano de las operaciones para el auxilio en caso de necesidades públicas, las acciones cívicas, obras sociales y la ayuda en caso de desastres, misiones esenciales para la vida institucional del país y que con su cabal cumplimiento refrendamos nuestro deber permanente de lealtad, honor y vocación de servicio a México.
“Estamos conscientes de que hemos concluido un proyecto de suma importancia y que nuestro compromiso con el pueblo de México aún no termina. Tenemos la firme convicción de continuar materializando otras obras sociales que tiendan al progreso del país. Señor Presidente, es justo y oportuno en este día expresarle nuestra lealtad y respeto por la confianza depositada en los soldados de tierra y aire, al asignarnos tareas primordiales que contribuyen al progreso y bienestar de la sociedad mexicana.”