Madrid. El miércoles 30 de marzo Disney+ estrena Caballero Luna (Moon Knight), la nueva serie de Marvel Studios. Oscar Isaac protagoniza esta ficción en la que da vida a Steven Grant, quien sufre trastorno de identidad disociativo y que el actor guatemalteco define como “un estudio del personaje” nunca visto en el Universo Marvel en el que se aborda de forma seria y constructiva un tema tan delicado como la salud mental.
Con esta serie “vi una oportunidad de hacer algo que no se ha hecho en el Universo Marvel, quizás un poco en el primer Iron Man”, señala Isaac en entrevista y asegura que en un panorama saturado de películas y ahora también de series de superhéroes, lo que hace “única” a Caballero Luna es “el personaje y mostrar cómo se siente él, su punto de vista, y habla también de la salud mental.
“No sé si hay un mensaje sobre el tema, pero la historia se desarrolla de forma que lo que tiene que pasar es una integración de las identidades, que se van sanando”, adelanta el actor criado en Miami que cree que, tal como ocurre en la serie, la mente es capaz de conseguir que el cuerpo haga cosas increíbles, casi imposibles.
“Para mí, esa es la clave de la historia. Parece que el superpoder es la capa, el traje y todo eso... pero la verdad es que su superpoder es una cosa real que la gente tiene”, apunta Isaac, quien recuerda cómo en su preparación conoció casos de personas con trastorno de personalidad múltiple que para “sobrevivir a traumas o abusos que habían sufrido cuando tenían cuatro o cinco años fracturaron su mente y crearon otros personajes para poder superarlo.
“Esas personalidades hasta tienen otro tipo diferente de sangre... son humanos completos que viven dentro del mismo cuerpo. Eso es un superpoder de verdad. Conocer eso para mí fue fascinante”, sentencia.
Fan confeso de los cómics de Marvel desde que era niño y con experiencia ya en el cine de superhéroes, donde dio vida al villano de la película X-Men: Apocalipsis (2016), y en otras grandes franquicias como Star Wars, Isaac dice no sentir vértigo al protagonizar, y también producir, la primera serie de Marvel Studios, centrada en un personaje que no apareció antes en las películas del Universo Cómic Marvel.
“Para mí eso solo supuso libertad, una oportunidad de crear lo que a nosotros más nos interesaba, pudimos quitar estereotipos y centrarnos en lo que para nosotros era más único”, explica con entusiasmo el protagonista de títulos como Inside Llewyn Davis, Ex Machina o Dune, que aprecia la oportunidad que supone presentar en pantalla “un personaje que la mayoría del público no conoce y que ha ido cambiando mucho en los cómics”.