La gente tomó ayer las calles después de dos años de encierro por la emergencia sanitaria de covid-19, sin miedo a contagiarse porque “las vacunas y el refuerzo nos hacen sentir protegidos, y por eso decidimos disfrutar del Festival de Primavera en el Zócalo y la Alameda, donde bailamos, gritamos y hasta comimos”.
Desde temprano, familias completas o parejas de capitalinos y turistas se dieron cita para recorrer las principales calles y avenidas del Centro Histórico, así como los comercios que abrieron sus puertas para aprovechar el último día del llamado puente largo e intentar recuperar sus ventas.
Al mediodía, la gente esperaba la presentación de música coral y danza de la compañía México de Colores y el Coro Gay Ciudad de México, como parte del festival realizado por la administración capitalina, que entre el sábado y el domingo reunió a 88 mil personas.
La cercanía de las decenas de asistentes “no generó miedo, pese a que algunos ya no usan cubrebocas, porque de alguna manera estamos protegidos con las vacunas”, señalaron entrevistados luego de disfrutar de un chicharrón, un mango o un refresco preparados.
Comerciantes ambulantes aprovecharon la gran afluencia de asistentes para ofrecer su mercancía en un área del Zócalo delimitada con cintas amarillas frente al edificio del Antiguo Ayuntamiento y vigilada por policías.
La ciudad “está retomando su nivel de actividades después de dos años de aislamiento, encerrados en nuestras casas y para nosotros la mejor forma de hacerlo fue venir a recorrer el centro y sus alrededores”, comentaron turistas de otros estados de la República, quienes disfrutaron también del circo de calle con los Estrouberry Clowns en el kiosco de la Alameda o de la banda sinfónica del Injuve en el Teatro del Pueblo. Algunos señalaron que esperarían hasta la noche para escuchar a Tania Libertad.
Hoy, afirmaron, “estamos de fiesta después de tantos contagios que cobraron la vida de seres queridos y amigos, y no queda más que seguir protegiéndonos con el cubrebocas, aunque parece que ya no será obligatorio”.