Minatitlán, Ver. Petróleos Mexicanos continúa en proceso de rescate y el llamado a sus funcionarios y trabajadores es que no permitan nunca más la corrupción en la empresa, y eso signifique pretexto a conservadores.
“Limpiemos por completo, terminemos de limpiar la corrupción en Pemex, lo mismo en la CFE. No demos ningún pretexto a los conservadores, que no tengan ninguna excusa porque estas empresas del pueblo tienen que ser ejemplo en administración honesta de los bienes del pueblo, de los bienes de la nación”, insistió durante la ceremonia del 84 aniversario de la expropiación petrolera.
En el enclave petrolero de Minatitlán-Coatzacoalcos, con sus funcionarios más cercanos, Rosa Icela Rodríguez, Octavio Romero, Rocío Nalhe, Manuel Bartlett, Luis Cresencio Sandoval, Rafael Ojeda, Jesús Ramírez y a la distancia el dirigente del sindicato Ricardo Aldana (artífice del Pemexgate, operador de Carlos Romero Deschamps y ungido hace semanas a la cabeza de esa organización gremial), el tabasqueño insistió en que Pemex está en un proceso de rescate luego de que durante el periodo neoliberal la saña y odio de los conservadores estuvo a punto de destruirla.
Y así ha sido posible la estabilidad energética hasta ahora, pues “en México no han subido las tarifas eléctricas ni los precios de las gasolinas, el diésel, el gas, y ello nos ayuda a frenar la inflación, a fortalecer la economía popular y a garantizar el bienestar de los mexicanos, sobre todo de los más necesitados, de los más pobres de nuestro país”.
La decisión de Lázaro Cárdenas de expropiar el petróleo, a la que llamó gesta, debe darnos orgullo; en pleno rescate de nuestra industria petrolera –dijo–, también es una lucha por recuperar el control de la nación sobre la industria eléctrica.
Por su parte, el director de la petrolera, Octavio Romero, adujo que la autosuficiencia en combustibles está cada vez más cerca; para el cierre de este año se logrará un nivel diario de producción de barriles de petróleo cercano a un millón 900 mil, en el contexto del desarrollo sin precedente de 32 campos petroleros, principalmente en el litoral de Tabasco.
“Hemos alcanzado en lo que va del año un millón 777 mil barriles de aceite por día y proyectamos cerrar el año 2022 con un promedio diario de un millón 875 mil barriles, esto es, 119 mil por arriba del promedio del año 2021”.
Hombre de las confianzas de López Obrador, el funcionario dio cuenta con amplitud del proceso de rescate de la paraestatal, que ha recibido un apoyo sin precedente y ha quedado de manifiesto con el desarrollo del derecho de la utilidad compartida, que pasó de 65 por ciento al inicio de esta administración a 40 por ciento este año, con aportaciones a la amortización de deuda de esta empresa pública, lo cual fortalece su viabilidad financiera.
“Con estas acciones, está garantizado que Pemex siga siendo la palanca de desarrollo de la nación por muchos años más. La visión presidencial siempre ha sido nacionalista para que los mexicanos mantengamos el control de nuestros recursos estratégicos y podamos aprovecharlos como base para nuestro desarrollo económico y social.
“Su compromiso de lograr la autosuficiencia en combustibles está cada vez más cerca, señor Presidente, y quedará cumplido en su totalidad una vez que se concluya con la rehabilitación del sistema nacional de refinación, con la construcción de la refinería Olmeca, en Dos Bocas, y con la conclusión de la coquizadora de Tula”.
Al término de la ceremonia, una vez que había saludado de mano al Presidente, Ricardo Aldana respondió con una perla mientras cobraba distancia –de dientes para afuera– de su amigo y mentor Carlos Romero Deschamps.
–¿Cómo se va a desmarcar de la figura de Carlos Romero Deschamps? Usted fue su mano derecha.
–Me creció otra mano, fíjate. Se me cayó una y me creció otra.
–¿Tiene relación con él todavía?
–No, no tengo relación.
–¿Inicia una nueva relación (con el gobierno)?
–El sindicato siempre ha estado presente en la vida nacional y hoy solamente hubo un impasse por las condiciones (…) pero hoy renovamos otra vez la relación.