Washington. Un policía de Virginia fue declarado culpable por un tribunal tras haber reconocido ayer ante un tribunal de Estados Unidos que participó en una conspiración para “obstruir e impedir” un procedimiento oficial, cuando irrumpió junto con otro compañero el 6 de enero de 2021 en el Capitolio, en Washington.
Jacob Fracker, quien al momento de los hechos ejercía como agente del Departamento de Policía de Rocky Mount, en Virginia, y era cabo en la Guardia Nacional en ese estado, ha reconocido su participación, como parte de un acuerdo de culpabilidad alcanzado con el Departamento de Justicia.
Fracker, arrestado en eneropasado, y poco después, despedido de las fuerzas de seguridad, relató que tanto él como su compañero, Thomas Robertson, engrosaron las filas de la turba de sediciosos seguidores de las teorías de la conspiración y del ex presidente Donald Trump que asaltaron el Capitolio.
Equipo táctico y Facebook
Admitió haber agredido y asaltado por la fuerza a los sobrepasados agentes que intentaron frenar la acometida, portar equipo táctico y militar –como máscaras antigás– y haber manifestado en redes sociales que alentaba el asalto al Capitolio.
Tras declararse culpable –se espera que ahora testifique en contra de Robertson– enfrenta cuatro posibles cargos, como obstrucción de un procedimiento oficial, entrada a un edificio restringido, alteración del orden público y ese mismo delito pero en su modalidad agravada por haber sido en un inmueble de acceso restringido, informó NBC.
Los fiscales señalaron que Fracker “se jactó en Facebook de haber orinado en el ‘baño de Nancy Pelosi””, la presidenta de la Cámara de Representantes y de ayudar al resto de exaltados arrojando gases lacrimógenos.
Más de 775 personas han sido detenidas por su implicación en estas revueltas del 6 de enero de 2021. La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) señaló que hay detenidos de casi cada uno de los 50 estados que conforman el país. La principal acusación que han presentado los fiscales es la de ingresar de manera ilegal en un lugar restringido mientras que el resto de los cargos más recurrentes son por agresión o resistencia a la autoridad.