Ciudad de México. Como si de un juglar se tratara, Aldo Asenjo, cantante chileno conocido como Macha, junto al Bloque Depresivo, ha acercado por más de una década, a diversas generaciones, los temas más tristes –y emblemáticos– del cancionero romántico latinoamericano –piezas clásicas chilenas, mexicanas, peruanas, pasando por Chavela Vargas, Silvio Rodríguez y José José– mediante sus reversiones, mismas que traerá en el mes de abril a la Ciudad de México, donde también presentará su segundo y tal vez “último” álbum denominado ¡Sacó la voz desde el camerín!
Esas canciones “las hemos tocado porque nos gustan” y porque “en realidad esta música también tiene que ver con la oralidad, con esto de que yo te cuento algo y tú lo puedes contar a otro, sin que esté grabado. Y así pasaba con muchas canciones en la antigüedad.
“Entonces, ocurrió que como nos gustaba (esa música), teníamos el gusto de poder tocar, y todos (los integrantes del Bloque Depresivo) también estábamos en otras cosas (grupos), sólo las tocábamos. Por lo menos, nunca me había planteado el sacar un disco con El Bloque”, explicó Macha en entrevista telefónica desde Santiago, Chile, a La Jornada.
Mejores bohemias
Cabe resaltar que la “banda”, surgida de proyectos ligados al rock, reggae y la cumbia, nació como las mejores bohemias: cuando las manecillas del reloj indican que todo se siente… más; y se hizo sobre los escenarios en los que tocaba Chico Trujillo, el otro grupo de Asenjo, cuando éste destinó un espacio a un listado de temas (valses peruanos, viejos boleros chilenos y canciones de desamor latinoamericanas) que denominó “bloque depresivo”.
“La idea era interpretar” esas canciones “chidas –que intercambiaban con Álvaro Henríquez, vocalista de Los Tres y quien también colabora con el Bloque, cuando se juntaban para ‘guitarrear’, pues siempre estábamos ‘¿Te sabes esta?’, ‘¡Ah, sí!’, ‘Y esta ¿Te gusta esta?’– y que la gente se fuera encontrando con ellas. Hacemos lo que hacen siempre los cantantes populares que se suben a la micro o que tocan en un bar, con una guitarra, y te van acercando” esas piezas. Así “se empezó a armar una cosa: por años estuvimos tocando y se empezaron a llenar” los foros, a compartirse los videos de sus actuaciones y a surgir comentarios sobre este proyecto, cuya popularidad se extendió por medio de los años por Latinoamérica y Europa sin grabar discos, sin difundir fotos ni videos de parte de la “banda” y sin conceder entrevistas.
“Se dio así”, abundó Asenjo, quien detalló que fue la necesidad, la que obligó al Bloque a grabar un disco, pues para poder tocar en diversos recintos, les pedían mostrar su material. En ese sentido, en 2012 se presentaron en el Theatre de la Ville in Paris (Francia), de donde surgió una grabación “que se subió a Internet y empezó a escucharse mucho. Eso nos ayudó a que más gente nos conociera” y se convirtió en “el primer disco-no disco del grupo”.
Fue hasta 2018 que El Bloque –integrado por Macha (voz y guitarra), Joselo (voz, guitarra y teclados), Pezoa, Pájaro y Pegafix (percusiones), Carlitos (trompeta y bronces), Tocori Berrú (bajo y guitarrón nicaragüense) y el dúo de Raúl Céspedes y Mauricio Barrueto (guitarras ‘destripadoras’)– publicó su álbum debut Macha y el Bloque Depresivo, 14 temas que se pueden escuchar en Spotify, entre las que destacan Vergüenza ajena, La nave del olvido, Lo que no fue no será y Mar y cielo.
Aunque la pandemia supuso una pausa para diversas actividades, Macha y el Bloque Depresivo aprovecharon ese periodo para hacer algunas grabaciones, entre ellas la de su versión de El Triste –famosa en la voz de José José– y a inicios de este año sorprendió a sus seguidores con el lanzamiento de Vuelve (Mondo) –tema del italiano Riccardo Foglio–, punta de lanza para la difusión del Lado A.
Un compilado de cinco piezas (que ya están en Spotify) que el grupo pudo grabar con una orquesta de cuerdas (violines, violas y contrabajo), 11 músicos orquestales, más la “banda” y Álvaro Henríquez sobre el escenario de un teatro en Santiago de Chile, sin público, por la crisis sanitaria, y que son parte de su segundo álbum, próximo a publicarse.
“Yo digo que este disco puede ser el último que hagamos, porque ya hicimos uno y también porque se cierra un ciclo de canciones que hemos hecho en estos años. Nuestras versiones con orquesta, más las nuevas piezas que vamos a sacar en el Lado B, van a completar esta etapa. Con eso ya tenemos una foto de lo que hemos hecho, grabado, y con eso está bien”, explicó el cantante.
“La gente ya conoce lo que hacemos y nuestra pretensión –o más que ella– es el goce de estas canciones, poder interpretarlas, cantarlas a nuestra pinta, jugar con ellas. Somos personas que se acercan a estos estilos porque los queremos y admiramos, pero no somos cantantes ni de bolero ni de base todo el día, y qué suerte que les guste y nos acompañen”, expresó al señalar que “fue gratificante” tocar en teatros “piezas que venían desde el Puerto de Valparaíso, algunas de ellas de Jorge Farías, El Ruiseñor”.
Pero no son las únicas canciones que el músico chileno, también líder del grupo La Floripondio y a quien le “gusta mucho Paquita la del Barrio”, retoma para su repertorio y que interpreta con otras bandas, pues en diciembre pasado presentó una reversión de No soy de aquí ni soy de allá, de Facundo Cabral, con su grupo Chico Trujillo; y también colaboró con el grupo venezolano Desorden Público con los temas Traicionera y El reo ausente, en un disco homenaje que ese grupo hizo al cantautor José Indio Pastor López.
“Es que son parte de un cancionero latinoamericano y nos van a tocar, como las conocemos en diferentes partes del continente, cuando las escuchamos nos evocan y nos llevan a todos, en el fondo, a lugares comunes. Son canciones que apuntan también a la simpleza, y en esa simpleza hay mucha grandeza; que hablan de una cosa que llevamos todos: esa melodía, la estructura de canción popular, que te va a gustar siempre. Con respecto a la canción de Facundo Cabral, la trabajamos con un amigo chileno –Gipsy & His Combo– y sacamos esta versión que tiene un pulso como más villero”.
Para su presentación con El Bloque Depresivo programada en el Foro Cultural Hilvana los días 20 y 27 de abril, Macha explicó que tocarán “todas esas canciones” que le han dado a conocer, así como “algunas sorpresitas interesantes en cada show. Vamos a tener invitados y va a estar bueno”. En tanto, prepara material con su grupo Chico Trujillo, mismo que presentará desde este mes, y con el que visitará la Ciudad de México “en septiembre u octubre”.