En el primer aniversario luctuoso del artista Vicente Rojo (1932-2021), el pasado 17 de marzo, El Colegio Nacional, del que era miembro desde 1994, le rindió un homenaje que incluyó el montaje de una muestra de 15 esculturas, que sirvió para reabrir su sala de exposiciones temporales. Vicente Rojo: Volcanes fue posible gracias a que en 2018 el pintor, escultor y diseñador gráfico donó dicha colección a la institución.

La exhibición está integrada por obras de las series Volcán despierto (2005), Volcán encendido (2000) y Volcán construido (1998), así como las piezas Volcán armado (2000) y Volcán metálico (1998), para cuya creación empleó materiales como bronce, cerámica y aluminio.

El acto inaugural contó con la presencia de Diego y Mara, nietos de Rojo. Vicente Quirarte, presidente en turno de El Colegio Nacional, recordó la figura del artista en el mismo sitio, hace unos años, con motivo de la apertura de su exposición Vicente Rojo: 80 años después. Cuaderno de viaje de Francisco Rojo Lluch en el vapor Ipanema, Burdeos-Veracruz, junio-julio de 1939. “Fue emocionante verlo con esa timidez que era tan suya y que conquistaba todos los corazones de manera inmediata”, aseguró el escritor.

Rojo, continuó, “supo desde siempre que vivimos en un país lleno de actividad volcánica. Como dijo José Revueltas, quien vio en los límites del Paricutín (en Michoacán), la energía liberada por los volcanes es anterior, incluso, a la llegada de los primeros pobladores y de los animales”. En sus esculturas, Rojo no quiso “domesticar a la fuerza, sino ofrecer su testimonio de amor a la tierra que hizo orgullosamente suya”, señaló Quirarte.

En la cédula de la exposición se lee que las formaciones geológicas de Rojo “nos remiten a su vez a ríos de lava, cordilleras rocosas, columnas de nubes y fumarolas que conectan la tierra con el cielo y que nos siguen mostrando un camino de símbolos perdurables que la plástica nacional no ha dejado de representar”.

En palabras de Sergio Pitol, “en este mundo de pirámides y volcanes, Rojo organiza un orden para más tarde abatirlo y levantarlo (…) Propicia una fusión de fragmentos oníricos con retazos de eso que cada vez con mayores reticencias llamamos realidad (…) Una manera no de evadir el mundo real, sino de abrazar todas sus posibilidades”.

En otro texto se señala: “Para Vicente Rojo, la imagen del volcán tenía un poder decisivo. La primera idea o esbozo que realizó de éste aparece en el año de 1987, durante el desarrollo de la serie Escenarios. Su punto de partida fueron figuras cónicas –asociadas con los volcanes– y triangulares, inspiradas en las pirámides. Durante los siguientes 25 años, Rojo continuará con una exploración sobre estas estructuras geológicas”.

La exposición Vicente Rojo: Volcanes permanecerá hasta el primero de julio en El Colegio Nacional (Donceles 104, Centro Histórico). La entrada es libre a todo público, de 11 a 18:30 horas, de lunes a viernes.