Para asistir a la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Angeles (AIFA), el próximo lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador no pernoctará en el hotel construido en esa terminal, como se había programado inicialmente, debido a que el inmueble –dijo– todavía no tiene licencia de operación.
El mandatario saldrá a las cinco de la mañana de Palacio Nacional rumbo al nuevo aeropuerto, en un trayecto que no le demorará más de 40 minutos a esa hora, previó.
El objetivo será llegar al AIFA a las 6 de la mañana para encabezar la sesión ordinaria del gabinete de seguridad, luego la conferencia de prensa habitual y más tarde la ceremonia.
De acuerdo con el Presidente de la República, el hecho de que él no tome la palabra en ese acto –ni en el corte de listón– garantiza el respeto a la veda electoral vigente.
Los que sí hablarán son el gobernador mexiquense, Alfredo del Mazo; la jefa del Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum; el responsable de la construcción, general Gustavo Vallejo, y el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval.
El tema de la nueva terminal aérea fue mencionado desde el inicio de la mañanera de ayer; primero a nivel de presupuesto, al aclarar que la obra tiene un plan de gasto de 74 mil 535 millones de pesos, y al corte del 15 de marzo se habían ejercido 61 mil 739 millones; tiene 9 mil 773 millones en bancos. El AIFA ha generado 162 mil empleos en los 880 días que lleva el proceso de construcción, por lo que rechazó la existencia de sobrecostos o dispendios.
Aunque el mandatario dijo esta semana que el tren de conexión de la estación Lechería y el aeropuerto Felipe Ángeles estará listo hasta el primer trimestre de 2023 y su función es primordial para alcanzar el objetivo de llegar a la terminal aérea en 45 minutos desde el centro de la CDMX, ayer se mostró optimista.
“Por cierto, ya no me voy a dormir allá, no, no; porque está terminado el hotel (construido por la Defensa Nacional), pero no está certificado, es un procedimiento y no quiero verme influyente”, señaló.
Además, dijo, “me voy a dormir aquí porque les voy a demostrar que voy a hacer media hora desde aquí hasta el aeropuerto. Bueno, media hora, 40 minutos”.
