París. La bailarina estrella del Teatro Bolshoi de Moscú, Olga Smirnova, abandonó la compañía para unirse al Ballet Nacional Holandés, en protesta por la guerra en Ucrania, informó la compañía holandesa en un comunicado.
"Smirnova ha denunciado abiertamente la invasión rusa de Ucrania, que ha convertido en inviable el trabajo en su país natal", aseguró el texto.
"El Ballet Nacional Holandés es un lugar ideal para avanzar mi carrera como bailarina. He estado pensando en este tipo de decisión desde hace tiempo. Simplemente las circunstancia actuales han acelerado este proceso", indicó la bailarina, de 30 años.
El texto oficial holandés también confirma la llegada a la compañía del bailarín brasileño Víctor Caixeta (22 años), solista del Ballet Mariinsky en San Petersburgo, una decisión que el artista ya había anunciado la semana pasada.
Smirnova y Caixeta actuarán juntos en el ballet Raymonda (del autor ruso Alexander Glazunov), cuyo estreno está previsto el 3 de abril, explicó la compañía holandesa.
El Ballet Nacional Holandés recuerda la declaración de Smirnova a principios de mes en la red Telegram.
"Tengo que ser honesta y decir que me opongo a la guerra desde el fondo de mi corazón", indicó su comunicado.
Tras recordar que tiene raíces ucranias por parte de su abuelo, Smirnova expresaba su profundo desaliento: "es un mundo moderno e ilustrado, espero que las sociedades civilizadas resuelvan sus temas políticos tan solo mediante negociaciones pacíficas".
"Nunca pensé que me avergonzaría de Rusia, siempre me he sentido orgullosa del talento del pueblo ruso", añadió.
"Pero ahora creo que se ha trazado una línea que significa un antes y un después", explicó.
Smirnova nació en San Petersburgo y se graduó como bailarina en 2011. Fue contratada como solista del Bolshoi, y en 2016 asumió el rol de directora.
Ha ganado numerosos galardones a lo largo de su carrera, entre ellos el Gran Premio del Dance Open Ballet Festival de San Petersburgo en 2016.
Caixeta también es citado en el comunicado de la compañía holandesa: "las circunstancias actuales significan que tengo que tomar la dura decisión de abandonar Rusia, el lugar que ha sido mi hogar durante casi cinco años", recordó el bailarín brasileño.