Kiev. Al continuar su ofensiva en Ucrania, las tropas rusas atacaron ayer una fábrica de aviones en Kiev, la más importante de Ucrania y conocida principalmente por producir muchos de los aviones de mercancías más grandes del mundo, donde murieron dos personas y siete más resultaron heridas, así como un edificio de nueve plantas en el distrito de Obolonskyi, aseguraron las autoridades ucranias.
El gobierno de Kiev señaló que estalló un gran incendio tras el bombardeo a la fábrica Antonov, con saldo de dos muertos y siete heridos, en el día 19 de la operación militar rusa en Ucrania.
Una persona falleció y doce resultaron heridas cuando un edificio residencial en Obolonskyi, en el norte de Kiev, fue alcanzado por disparos de artillería, según las autoridades.
Más al oeste, nueve personas murieron y otras nueve resultaron heridas en un bombardeo ruso contra una torre de televisión en Antopil, cerca de la ciudad de Rivne.
Las alarmas antiaéreas sonaron en ciudades y pueblos de todo el país durante la noche de domingo a lunes, desde la frontera con Rusia al este hasta los Cárpatos en el oeste, mientras continuaba el combate en las afueras de Kiev.
Un concejal de Brovary, al este de Kiev, murió en los combates en la zona, según las autoridades. También cayeron proyectiles en las localidades de Irpin, Bucha y Hostomel, que han visto algunos de los peores combates dentro de los infructuosos esfuerzos de Rusia por tomar Kiev, según las autoridades locales.
Se reportaron ataques aéreos a lo largo del país, incluso en la ciudad sureña Mykolaiv y en la ciudad norteña Chernigov, en donde gran parte de la ciudad estaba sin calefacción. Durante la noche también se oyeron explosiones en torno al puerto de Jerson, junto al Mar Negro y ocupado por Rusia.
En la ciudad oriental de Jarkov los bomberos extinguieron los restos en llamas de un edificio residencial de cuatro plantas en una calle de apartamentos y tiendas. Los servicios de emergencia ucranios indicaron que un ataque impactó el inmueble, dejando pilas de madera y metal en llamas. No estaba claro si había muertes.
Del otro lado, 23 civiles perecieron en la ciudad de Donietsk, en una ofensiva en la que el ejército ucranio empleó un misil Tochka-U, cargado con una bomba de racimo, según las autoridades rusas.
Moscú denunció en la Organización de Naciones Unidas el uso de municiones de fósforo y bombas de racimo.
El portavoz del ministerio de Defensa ruso, el teniente general Igor Konashenkov, indicó además que 28 civiles, entre ellos menores, resultaron heridos de gravedad a causa del misil que tenía una cabeza explosiva llena de esquirlas, lo que viola las convenciones de Ginebra.
Se encontraron sistemas de misiles antitanque de fabricación estadunidense en las posiciones abandonadas de los nacionalistas ucranios que fueron expulsados de Volnovaja, en la región de Donietsk, señaló Yan Gaguin, asesor del jefe de gobierno de la república popular de Donietsk.
“Aquí hay otra exhibición del suministro de armas extranjeras a Ucrania para los nazis. Aquí se puede ver claramente la pertenencia, producción”, destacó Gaguin al señalar la inscripción USA en el tubo de un misil antitanque.