Ciudad de México. El procurador del consumidor, Ricardo Sheffield, calificó de histórico, “el cien por ciento de incentivo fiscal de IEPS a las gasolinas y el diésel”, y el presidente Andrés Manuel López Obrador sumó a esa acción que “si mantenemos este precio de gasolinas, y de diésel, controlamos la inflación”.
En su conferencia de prensa, el tabasqueño reprochó a los tecnócratas la desaparición de los subsidios, porque propiciaron la desventaja de los productores mexicanos ante sus competidores. Y además vio que “se va a resolver lo de la reforma eléctrica”, y dejó en manos de los diputados y senadores la carga de su aprobación: “Son los que van a decidir. Y es muy interesante, porque también es un emplazamiento para ver quiénes están a favor de la Comisión Federal de Electricidad, que es una empresa pública, que da el servicio desde hace mucho tiempo y que se propone no aumentar las tarifas, y por eso esta reforma, o qué legisladores están a favor de Iberdrola o de Repsol o de las empresas extranjeras, ahí se va a ver con mucha claridad.”
Al inicio de la exposición matutina ante las y los reporteros, Sheffield anunció –exultante– la aplicación del subsidio: “en esta semana es una situación histórica: por primera vez, 100 por ciento de incentivo fiscal del IEPS a la Premium, a la regular y al diésel, por instrucciones del señor Presidente se está buscando sea el precio de noviembre de 2018. Se está logrando y claramente nos beneficia de manera directa e indirecta a todo el pueblo de México”.
Para dar relevancia a ello, López Obrador pidió se proyectará una tabla de precios de la gasolina regular en países de alto ingreso: Alemania, 45.60 pesos por litro; Francia, 43.82; España, 39.74; Estados Unidos, 32.62; Canadá, 31 pesos el litro; China, 28.61, y en el caso de México 22.42.
Así, desglosó que la política energética ha dado resultados, porque “no hay corrupción; tomamos decisiones desde el principio y estamos reduciendo las importaciones de combustible; y, podemos sostener el precio, que no haya gasolinazos, que no aumente el costo por encima de la inflación”.
Las utilidades del crudo, para subsidiar energéticos
Y así concluyó que “las utilidades que tenemos por el incremento del precio del crudo nos alcanzan para no cobrar el IEPS”, y con ello se gana en control de inflación. “Si no cuidamos la inflación, aunque aumentemos el salario, la inflación acaba con todo, la carestía de la vida”.
De ese modo, reprochó la desaparición de los subsidios 36 años atrás, “porque los tecnócratas dogmáticos llegaron a satanizar el subsidio, cuando impusieron la política neoliberal no se podía hablar de subsidio, ni de fomento a la actividad productiva, mientras en otros países mantenían subsidios aquí los quitaron”.
Al abundar sobre el proceso en que se encuentra su propuesta de reforma eléctrica, esbozó confianza “yo creo que se va a resolver lo de la reforma eléctrica”.