Tijuana, BC., Mientras la Iglesia católica y los grupos antiaborto promueven la realización de un referéndum para volver a imponer penas corporales a las mujeres que interrumpan un embarazo en Baja California, 14 féminas han conseguido que el estado les realice el procedimiento (de un grupo de 30 que lo solicitó), y sólo una clínica particular ha practicado alrededor de 250, a partir de que se legalizó esta práctica, en octubre pasado.

Omar García, médico de la clínica Médica Center Fem, explicó que de las pacientes atendidas “una gran cantidad vienen de Tijuana; las hemos citado en Mexicali porque todavía no tenemos clínicas en Tijuana. Llegan también de Playas de Rosarito y de Sonora”.

Aunque el sector salud de Baja California informó que es obligación del gobierno dar la alternativa de interrumpir el embarazo a las mujeres que lo soliciten, un número importante de médicos de hospitales públicos se niegan a hacerlo alegando objeción de conciencia, y “no se les puede obligar”, puntualizó el director del hospital general de Tijuana, Clemente Zúñiga Gil.

La arquidiócesis de Tijuana y los grupos antiaborto quieren que regresen los castigos contra las mujeres y promueven un procedimiento jurídico para revertir la reforma que despenalizó el aborto voluntario hasta las 12 semanas.

En la recta final del proceso legal para que el Instituto Estatal Electoral decida si se realiza el referéndum, recolectan firmas y realizan marchas. La Comisión de Participación Ciudadana y Educación Cívica del organismo aprobó por unanimidad la solicitud de la consulta; sólo falta llevar el tema al pleno para que determine si es o no trascendente para la vida pública del estado, como lo señala la ley.

El consejero electoral y presidente de dicha instancia, Abel Muñoz Pedraza, señaló que el Instituto Nacional Electoral validó alrededor de 26 mil firmas, lo que equivale a por lo menos 0.5 por ciento de la lista nominal de Baja California.

El fin de semana agrupaciones “provida” se movilizaron para seguir recabando rúbricas. Flor García, presidenta de Dimensión Vida, de la arquidiócesis de Tijuana y participante en la 22 Marcha caravana por la vida, la familia y la paz, explicó que el sondeo “busca revertir esa aprobación de liberar el aborto en el caso extremo, hasta los nueve meses de embarazo”.