Washington. La Casa Blanca aseguró ayer que no hay conversaciones en curso sobre importación de petróleo de Venezuela y destacó que la liberación por parte de Caracas de dos ciudadanos estadunidenses encarcelados a principios de esta semana no se realizó a cambio de un alivio de las sanciones.
“Por el momento no hay discusiones en curso sobre las importaciones de petróleo venezolano”, informó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki.
“Si bien son un gran productor de petróleo, en este momento no se ha dado una conversación sobre la importación de su petróleo”, añadió, y precisó que “la liberación de los detenidos no fue a cambio de un alivio de las sanciones o de la compra de petróleo”.
Al citar a un alto funcionario estadunidense, Bloomberg señaló que Estados Unidos podría reducir las restricciones económicas a Venezuela luego de la prohibición de las importaciones de petróleo y otros productos de energía de Rusia, pero la decisión final dependerá del resultado de las conversaciones entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición.
Están en curso las conversaciones sobre el comercio de petróleo a nivel general y funcionarios estadunidenses, que visitaron Venezuela el sábado, no se comprometieron a una relajación de las sanciones, indicó Bloomberg.
Más tarde, el vocero del Departamento de Estado, Ned Price, sostuvo que la disposición expresada por Nicolás Maduro para volver a dialogar con la oposición es un paso importante para solucionar la crisis política del país sudamericano.
Señaló que Washington seguirá apoyando al ex diputado Juan Guaidó, líder de la oposición, pero respaldará las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano también por otros canales.
El gobierno venezolano ratificó su respaldo a su aliado Rusia durante un encuentro entre el canciller ruso, Serguéi Lavrov, y la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez. “Revisamos nuestras relaciones estratégicas bilaterales y el complejo escenario internacional”, tuiteó Rodríguez.