Santiago. El izquierdista Gabriel Boric juró el viernes como nuevo presidente de Chile con la promesa de impulsar mejoras sociales y disminuir la desigualdad de la mano de un gabinete en el que predominan las mujeres.
Boric, que con 36 años se convirtió en el mandatario más joven en la historia de Chile, reemplazó al centroderechista Sebastián Piñera. En el nuevo gobierno Boric también estará acompañado de varios de los que junto con él dirigieron las protestas callejeras de 2011 y 2012.
En el salón de honor del Congreso en el puerto de Valparaíso, 120 kilómetros al noroeste de la capital chilena, Boric prometió “ante el pueblo y los pueblos de Chile… cumplir fielmente” con el cargo de presidente, tras lo cual el líder del Senado, el socialista Álvaro Elizalde, le puso la banda presidencial a la que se colgó una tradicional estrella de cinco puntas que simboliza el traspaso del poder.
Poco después el mandatario juramentó a su ministra del Interior, Izquia Siches, quien liderará su gabinete compuesto por 14 mujeres y 10 hombres con el que buscará inaugurar lo que ha denominado un “gobierno feminista”.
Fiel a su estilo, llegó sin corbata a una de las ceremonias más simbólicas de Chile. Las dos veces que juró como diputado -en 2014 y 2018- tampoco la había usado.
En el salón había unas 500 personas, la mitad de su capacidad para respetar los aforos impuestos por los protocolos sanitarios por la pandemia, en un país en el que el 76 por ciento de la población tiene una o dos dosis de refuerzo.
El nuevo presidente para el período 2022-2026, acompañado de la primera dama Irina Karamanos, ofrecerán una recepción a los invitados al cambio de mando para regresar al atardecer a la sede de gobierno en Santiago, desde donde dirigirá un tradicional mensaje a los chilenos.