La exposición Lu’Biaani: Francisco Toledo y la fotografía, integrada por más de 400 imágenes, así como documentos de archivo, piezas artísticas e instalaciones, concluirá el domingo 13 en el Colegio de San Ildefonso. La muestra busca reconocer de manera integral la impronta del maestro Toledo (1940-2019) en el arte fotográfico.
De acuerdo con Alejandro Castellanos, curador de Lu’Biaani, Toledo ha sido el artista que más influyó en la fotografía en México, hecho paradójico, porque no fue un fotógrafo consumado. “No hay nadie que haya propiciado que tantos jóvenes se adentraran en la fotografía y desarrollaran sus proyectos”, afirmó en un recorrido el investigador del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de las Artes Plásticas (Cenidiap), del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura.
Tanto fue el interés del pintor y grabador por la fotografía, que en 1996 fundó el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo (CFMAB), cuyo 25 aniversario se celebra justamente con Lu’Biaani, que en zapoteco significa “ojo de luz” o “sobre la luz”. Su acervo, aún en inventario, suma 100 mil piezas. Es una de las colecciones más relevantes, no sólo en México, sino en América Latina, consideró Castellanos.
En el CFMAB, los interesados pudieron tomar talleres y ver exposiciones de otros fotógrafos. Al abrirse, en 2006, el Centro de las Artes de San Agustín Etla, ya se ofrecían seminarios de fotografía de largo plazo. Empezó un movimiento que ya no estaba en el centro del país, sino en estados también como Guerrero y Veracruz.
La exposición abarca una amplia gama de fotógrafos, desde personalidades como Graciela Iturbide, quien lo acompañó y retrató durante décadas, hasta representantes de las nuevas generaciones. Participan figuras como Manuel y Lola Álvarez Bravo, Henri Cartier-Bresson, Edward Weston, Sebastiao Salgado, Joseph Koudelka, Juan Rulfo, Rafael Doníz, Guillermo Kahlo y Trine Ellitsgaard.
Dividida en ocho núcleos, el eje de la muestra es mostrar los orígenes del interés en Toledo, que le hicieron impulsar lo que acabó en un movimiento fotográfico en Oaxaca, hasta el resultado tangible en los expositores, cuyo trabajo se muestra al final del recorrido. Lu’Biaani incluye alrededor de 30 piezas que Toledo tomó con cámara analógica o en las que intervino.
“Hay un apartado que, hasta donde tengo entendido, es inédita. Comprende piezas que el maestro mandaba hacer a partir de una imagen que le llamaba la atención. Me sorprendió su manera tan lúdica y abierta de trabajar con las fotos. Originalmente provienen de revistas que recibía para seleccionar los libros para sus bibliotecas. Aquí se ve su manera de acercarse a la fotografía jugando, ya que mandaba hacer copias grandes de imágenes pequeñas, que luego intervenía”, agregó Castellanos.
En la muestra se incluyen ejemplos de las polaroids de Toledo y dos piezas de su serie La sombra del deseo, imágenes que intervino a partir de revistas porno.
El Colegio de San Ildefonso se ubica en Justo Sierra 16, Centro Histórico.