Ciudad de México. En la presentación de su libro Por una democracia progresista: debatir el presente para un mejor futuro, el ex candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano afirmó que actualmente tenemos una administración “débil en el sentido de que no tiene la capacidad para enfrentar los principales problemas de la población, llámese pobreza, inseguridad”, entre otros.
Además, enfatizó que frente a “la destrucción institucional que se ha vivido en estos últimos años, una de las grandes tareas y algo que tendría que estar justamente en un proyecto nacional es cómo se camina a una reconstrucción de instituciones, o a la modernización” de éstas. Ahí, ahondó, “entra todo lo que tiene que ver con la banca de desarrollo, de fomento, con que tengamos efectivamente banca que estimule el desarrollo industrial, que apoye los desarrollos agrícolas, el turismo, etc, que tengamos instituciones que aumenten sus capacidades de apoyo a las actividades productivas y no que haya restricciones en ese campo como las hemos tenido últimamente”.
En una conferencia organizada por el Seminario Universitario de la Cuestión Social, del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo de la UNAM, el ingeniero Cárdenas Solórzano destacó que muchos de los problemas que vive el país “se debe también a la interrupción del impulso que llevaba la Revolución Mexicana”, de las distintas políticas, por lo que “habría que pensar seriamente en cómo recuperar rumbos”.
También, se refirió a las remesas que llegan a México. Criticó que “en cierto sectores oficiales, muy importantes de gobierno”, se exalte y se mencione esto “como un gran logro”, pero es “una enorme vergüenza para el país que miles de familias estén viviendo de las remesas que llegan del extranjero”. Esto, aseveró, es una “muy seria señala de que ha habido fallas, faltas, omisiones, desviaciones en los gobiernos, no nada más en éste, de modo que mucha gente ha tenido que irse al extranjero y que desde allá están sosteniendo familias, pueblos, etc”.
En la conferencia participaron el investigador emérito de la UNAM, Diego Valadés, quien entre otros temas subrayó la necesidad de contar con “un sistema representativo eficaz”, que participe en la deliberación, en el seguimiento, en la evaluación y en el control de los programas o planes de desarrollo, ya que si no se tiene esto “todo seguirá dependiendo de la voluntad de una sola persona”.
Por su parte la economista Clara Jusidman, destacó que actualmente “estamos paralizados en términos de construcción de diálogo”. Indicó que “sistemáticamente estamos pensando cómo incidimos en el aparato público, cómo nos escucha el Presidente” para que lo que le preocupa a la población “le llegue y lo escuche y esté dispuesto a oírnos”.