Ciudad de México. La inflación general se aceleró en febrero por encima de lo esperado, mientras que la variable subyacente alcanzó su mayor nivel en más de 20 años, reforzando las expectativas de que el banco central continuará subiendo su tasa clave.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en 7.28 por ciento a tasa interanual, después de enfriarse ligeramente los dos meses previos, de acuerdo con cifras divulgadas este miércoles por el instituto de estadística. Analistas proyectaban que creciera a 7.23 desde 7.07 por ciento de enero.
Por su parte, la inflación subyacente, considerada un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios porque elimina productos de alta volatilidad, registró una variación de 6.59 por ciento, su nivel más alto desde junio de 2001.
Tras conocer los datos, el subgobernador del Banco de México Jonathan Heath advirtió este miércoles que el índice subyacente aún no ha alcanzado su pico y estimó podría rebasar 6.7 por ciento en marzo, debido a la presión en los precios globales generada por el conflicto en Ucrania.
"Panorama de por si complicado", escribió en su cuenta de Twitter. "La inflación elevada será más persistente que lo que habíamos anticipado, tanto en México como en el ámbito mundial".
El banco central, que tiene una meta permanente de inflación de 3% +/- un punto porcentual, elevó el mes pasado en 50 puntos base la tasa interbancaria de referencia, en su sexta alza seguida, citando una mayor duración y magnitud de las presiones inflacionarias.
Su siguiente decisión de política monetaria está programada para el 24 de marzo, una semana después de la reunión de la Fed, en la que se espera que el banco central estadunidense comience a subir los tipos de interés desde su actual nivel cercano a cero.
Sólo en febrero, los precios al consumidor aumentaron 0.83 por ciento, mientras que el índice subyacente arrojó una tasa de 0.76, en medio de incrementos de productos como el gas doméstico, la gasolina de bajo octanaje, el pollo y el limón.