Ciudad de México. El gobierno federal mantiene una política de pleno desarrollo, apoyo y cuidado de los derechos de la mujer, aseguró la titular del Instituto de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman.
Al intervenir en la ceremonia oficial -en Palacio Nacional- por el Día Internacional de la Mujer, la funcionaria reiteró que las acciones del gobierno, son ahora, más numerosas en respaldo de la política de género.
A continuación se reproduce integra la participación de la funcionaria:
Muy buenos días, señor presidente Andrés Manuel López Obrador, y gracias por darnos la bienvenida a este lugar mágico de México.
Doctora Claudia Sheinbaum, doctora Olga Sánchez Cordero, doctora Loretta Ortiz, diputada Andrea Chávez, feliz cumpleaños; maestra Victoria Rodríguez Ceja.
Hoy estamos presentes en este lugar principalmente las mujeres líderes de la transformación: las gobernadoras de Baja California, Campeche, Colima, Guerrero, Tlaxcala y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, que nos demostraron en el gran encuentro de mujeres por la transformación que compartimos el sueño de transformar las desigualdades en bienestar, que somos miles de mujeres, somos millones de mujeres.
Estamos aquí también las secretarias y secretarios de Estado que trabajan todos los días por la igualdad, las presidentas municipales, diputadas federales y locales, nuestras ministras de la Suprema Corte de Justicia, así como mujeres líderes, como la gobernadora del Banco de México y otras compañeras de lucha, los medios de comunicación y quienes nos están viendo por las redes.
Todas, mujeres progresistas y feministas, que hemos asumido como compromiso y fuerza ser parte de la Cuarta Transformación, para no dejar a nadie atrás y no dejar a nadie afuera, porque sabemos que nadie en nuestro país ha sido históricamente más relegada y olvidad que las mujeres y las niñas, especialmente las mujeres indígenas, las pobres entre los pobres, las desheredadas de la historia hasta ahora.
El 8 de marzo es una fecha para conmemorar las luchas por el avance de los derechos de todas las mujeres, del camino andado por mujeres diversas que pelearon por el reconocimiento de cada derecho: el derecho a votar por un salario justo, el reconocimiento pleno de su calidad de ciudadanas a decidir sobre su cuerpo, su sexualidad, maternidad y placer. Y este día, hacemos un alto para recuperar nuestra memoria histórica, la memoria de la historia de las mujeres, para seguir orientando nuestras luchas pendientes y reconociendo nuestros logros colectivos.
Y quiero dirigirme a todas las mujeres para decirles que compartimos su sentido de urgencia para cambiar las cosas, que no están solas y que este gobierno está de su lado.
Quiero reiterarles que la agenda por los derechos de las mujeres es nuestra agenda y que trabajamos todos los días para construir una alianza entre todas, porque en 2018 llegó el tiempo de las transformaciones estructurales y de raíz, los tiempos de cambio.
Cambiar radicalmente siglos de desigualdades es un esfuerzo constante, cotidiano y colectivo con el que todo el gobierno estamos trabajando desde diferentes flancos para cerrar las brechas, las enormes lagunas de desigualdad, fruto de siglos de discriminación, abuso y violencia.
Este gobierno transforma la desigualdad, reduce la pobreza y mueve el país a través de un modelo económico y social que abre una era de redistribución del bienestar. En promedio, 57 por ciento del total de los recursos de los programas prioritarios de gobierno han beneficiado directamente a millones de mujeres, niñas, jóvenes, adultas mayores y personas con alguna condición de discapacidad. Son millones de mujeres cuyo ingreso ha aumentado su autonomía y ha mejorado la calidad de vida de ellas y de sus familias.
En materia electoral y de representación, estamos viviendo desde 2019 lo que llamamos la paridad en acción, gracias a las diputadas y senadoras que nos dieron la paridad en todo, en todos los niveles, en todos los órdenes de gobierno.
Actualmente la Cámara de Diputados y Diputadas, el Senado de la República, los 32 congresos locales, tienen paridad y hay paridad en las comisiones, en las presidencias de las comisiones en todo el país.
Tenemos siete gobernadoras, nunca habían gobernado juntas tantas mujeres, y se ve y se siente, queridas.
Cuatro ministras de la Suprema Corte y una gobernadora del Banco de México.
Más mujeres en la vida pública implica que hagamos visibles los problemas de exclusión y desigualdad que vivimos las mujeres, implica hacer propuestas para erradicar estos lastres, seguir abriendo la brecha y sembrando derechos e igualdad, porque la democracia paritaria sólo tiene sentido para alcanzar la justicia social.
En el Instituto Nacional de las Mujeres construimos igualdad para prevenir las violencias, contamos el Gobierno de México con un modelo integral de prevención primaria de las violencias contra las mujeres que establece estrategias y acciones orientadas a transformar los patrones socioculturales que las generan, y que resume años de experiencia de las organizaciones y acción de las mujeres, quienes con su movilización por igualdad y derechos abonan a la construcción de la paz aquí en México y en el mundo, tan importante el día de hoy.
En el mismo sentido impulsamos el Sistema Nacional de Cuidados, reconociendo el carácter político de los cuidados, su aporte a la economía nacional y al bienestar colectivos, que son trabajos realizados históricamente por las mujeres e históricamente invisibilizados.
Es una propuesta de articulación de instituciones que atiende a grupos sociales prioritarios bajo los principios de sustentabilidad financiera, universalidad y progresividad. Son apuestas transformadoras, porque buscan revertir los efectos nocivos de los años de políticas neoliberales que impusieron el imaginario de un individuo que no necesita de los demás.
Nosotras creemos que nuestro Sistema Nacional de Cuidados es un creador de cohesión social, es un restaurador de lazos sociales y es un motor de paz. Nuestro gobierno está trabajando para lograr un país más justo con las niñas y mujeres que lo habitan, donde sus palabras y sus sueños cuenten, donde su derecho a la educación y a desarrollar sus talentos sean una realidad, donde la violencia no interrumpa sus proyectos de vida, donde las niñas no sean esposas, sino niñas, donde la sociedad asuma la parte de responsabilidades que le toca en relación con los cuidados de las personas dependientes, porque es justo y porque ser más igualitarios nos dará fuerza colectiva, nos permitirá crecer como país haciéndonos mejores.
Hoy, 8 de marzo, sigamos juntas y juntos porque las mujeres y niñas de México merecemos tener una vida plena, en igualdad, sin discriminación ni violencias, sin que interrumpan su libertad, su crecimiento y sus proyectos de vida.
Sigamos trabajando por una transformación con y para las mujeres.