A partir de septiembre, el Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) impulsará un nuevo plan de Educación Comunitaria para el Bienestar, el cual permitirá a las poblaciones ubicadas en localidades remotas y de alta y muy alta marginación, elegir a sus figuras de enseñanza, personas que serán capacitadas para atender a niños de instrucción inicial, prescolar, primaria y secundaria.

Gabriel Cámara y Cervera, director general del Conafe, explica: “Queremos una educación que sea motor del bienestar, que los temas que ofrezcas sean relevantes para el individuo y la comunidad (…). Tenemos que empoderar a ésta, que Conafe le dé el recurso para que contrate a sus promotores educativos y nosotros los capacitamos”.

En entrevista, señala que el proyecto comenzará en 160 poblaciones de varios estados. En Conafe, indica, se enfrenta la movilidad continua de los instructores, quienes permanecen en las localidades uno o dos años antes de proseguir el bachillerato o la licenciatura.

“Va el instructor, pero cuando falta la comunidad se queda esperando. Entonces, que decida quiénes de su gente, con independencia de edad o formación, pueden ser instructores. Nosotros los formamos, que la comunidad decida y que el elegido se responsabilice ante ella”, apunta.

Buscamos, afirma, que este recurso que tiene Conafe para contratar instructores se dé en parte a la comunidad, para que sea la que decida entre su gente a los que van a quedar, quienes permanentemente atenderán la educación inicial, primaria y secundaria.

Advierte que se deberá contar con reglas claras: “A qué se compromete la comunidad, a qué nosotros y, sobre todo, apoyar el arraigo voluntario del que depende el bienestar colectivo. No empobrecer a la comunidad para que los más destacados tengan que salir”.

Con el impulso del Conafe a la relación tutora, un modelo pedagógico basado en la confianza y el respeto mutuo entre tutor y aprendiz, en el cual el interés de quien se instruye es el motor de enseñanza-aprendizaje, también se impulsará que la formación profesional de los habitantes de los lugares más apartados del país no implique que migren de forma obligada.

“Queremos aprovechar la tutoría para que en los programas de universidades a distancia no obliguen a los estudiantes a tener que asistir los fines de semana, pero que haya un tutor de la institución que por servicio esté atendiendo a través de Internet a quien está haciendo una carrera”, señala Cámara y Cervera.

“Cuando no se puede tener esta plática cara a cara, que es lo ideal, Internet es un sustituto extraordinario cuando compartes la misma experiencia, que sabes que no le vas a dar una respuesta, no le vas a enseñar, sino vas a hacer que él aprenda por su cuenta que descubra que tiene la capacidad de entender.”

En cuanto al nuevo marco curricular y planes de estudio de la educación básica que propone la Secretaría de Educación Pública, afirma: “Nos cae como anillo al dedo porque mucho de la relación con la comunidad ya la estamos haciendo en el Conafe”. Reconoce que se trata de una propuesta que “viene de arriba, con las mejores ideas que se han recolectado, pero viene de una oficina, y el problema para los que están haciendo este nuevo marco curricular es que se realice”.

Agrega que otra de las acciones para fortalecer la tarea de los instructores es que el Conafe prevé aumentar su tiempo y capacidad de conectividad a través de los celulares inteligentes.