A pesar de que emprender ha sido un recurso utilizado ante la escasez de trabajo, el cierre de negocios propios al cierre del cuarto trimestre del 2021 es casi el doble de lo que se registró en 2018.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del cuarto trimestre de 2021, en México hay 2.2 millones de personas desocupadas, de las cuales 98 mil 515 lo son porque dejaron o cerraron un negocio propio.
Aunque este antecedente laboral echó freno al cierre del cuarto trimestre de 2021 con respecto al mismo periodo de 2020, cuando en aquel entonces se registraron 124 mil 779 desocupados por haber cerrado su negocio propio; para 2018 fueron sólo 51 mil 756 individuos.
La ENOE precisó que durante el último cuarto de 2019, cerca de 86 mil personas dejaron o cerraron un negocio propio, lo que hace notar que con la pandemia de covid- 19 se incrementó el número de personas desocupadas por este motivo. Con las medidas de sana distancia y el cierre de actividades económicas no esenciales se dañó sustancialmente a la empresa nacional.
De los emprendimientos que han fracasado en el país, 22 por ciento de éstos se relacionan directamente con problemas para acceder a financiamiento, según información de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM). Además, 90 por ciento de las empresas mexicanas sobreviven con recursos propios durante los primeros tres años de vida.
“A pesar de la importancia de las pymes para este país, se trata de un sector cuyo acceso a fuentes de financiamiento está muy acotado, en particular cuando se acercan a la banca tradicional”, explicó Bernardo Prum, director gerente de Creze, plataforma que ofrece préstamos en línea para pequeñas y medianas empresas en México.
Ante la falta de créditos, los fundadores o personas a cargo de las pequeñas y medianas empresas (pymes) tienden a mezclar las finanzas personales o de sus familias con las del negocio, lo cual es un grave error. Incluso en algunas ocasiones es el emprendedor el que solicita un préstamo personal, en lugar de uno especialmente diseñado para atender las necesidades de liquidez de su empresa, agregó.
Las micro, pequeñas y medianas empresas son la columna vertebral económica del país, pues representan 99 por ciento de las unidades económicas del país y generan 70 por ciento de los empleos.
De 56.6 millones de personas ocupadas al cierre de 2021, en el sector formal e informal, 23.2 millones trabajó en un micronegocio, de los cuales 12.9 millones se emplean sin establecimiento y 10.3 millones con establecimiento, según la ENOE.
Además, los emprendedores no siempre son especialistas en finanzas y en ocasiones ni siquiera tienen acceso a la información completa del mercado; además, rara vez tienen la liquidez para invertir en asesores financieros que los orienten. No obstante, cabe la posibilidad de que una buena marcha del mercado laboral influye en el estancamiento de la creación de empresas.