Korczowa, Polonia. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se reunió con su homólogo ucraniano, Dmytro Kuleba, en la frontera entre Polonia y Ucrania, invadida por las tropas rusas desde hace diez días.
Blinken y Kuleba estuvieron reunidos durante 45 minutos, bajo importantes medidas de seguridad, en un punto fronterizo por el que pasan miles de refugiados.
Ambos discutieron sobre el envío de armas a Ucrania y los mecanismos para aumentar la presión sobre Moscú.
"Espero que la gente en Ucrania sea capaz de ver esto como una clara manifestación de que contamos con amigos que están a nuestro lado", aseguró Kuleba, tras su reunión en el puesto fronterizo de Korczowa-Krakovets.
Ucrania "prevalecerá", dijo Blinken.
"No es un secreto para nadie que nuestra petición más importante sea sobre los cazas, los aviones de asalto y los sistemas de defensa aérea", afirmó Kuleba.
"Necesitamos sistemas de defensa aérea que garanticen la seguridad de nuestros cielos. Si perdemos los cielos, habrá mucha más sangre en el suelo", añadió.
También criticó la negativa de la OTAN a establecer una zona de exclusión aérea en Ucrania, justificada por el riesgo de que degenere en una "guerra total", según la Alianza Atlántica.
"Me parece una señal de debilidad", lamentó Kuleba, quien sostuvo que "el pueblo ucraniano pagará el precio" de esta decisión.
El ministro ucraniano agradeció la coordinación para adoptar importantes sanciones contra Rusia, pero expresó su temor a que estas medidas sean aplicadas con desgana con el fin de evitar un impacto económico en los propios países occidentales.