Washington. El presidente del Banco Mundial (BM), David Malpass, informó el domingo que habrá una reunión de ministros de Finanzas del G-7 el martes para evaluar la ayuda a Ucrania y se refirió a las sanciones a los bancos rusos, así como a los efectos inflacionarios por el conflicto.
Esta invasión es una “tragedia para Ucrania pero también para Rusia”, afirmó.
Sin mencionar una cantidad, expresó que la institución que dirige estaba dispuesta a brindar apoyo “en los próximos días”, a través de financiamiento de rápido desembolso.
Sobre las sanciones occidentales que prevén excluir a los bancos rusos de la red interbancaria Swift manifestó que “afectan a los bancos pero aparentemente no a la industria del gas y el petróleo”, de la que Rusia es uno de los mayores productores del mundo.
Pero si los dirigentes occidentales “logran detener el funcionamiento del Banco Central ruso, realmente tendrá un efecto en el pueblo de Rusia”, declaró Malpass a CBS.
El funcionario estimó que sería difícil para Moscú esquivar el impacto de las sanciones de Swift optando por el sistema rival chino. “No creo que llegue muy lejos”, apuntó.
Acerca del impacto de la guerra y las sanciones sobre la inflación global, el jefe del BM reconoció “la gran preocupación que pesa sobre los precios del petróleo y los alimentos”.
“La inflación está golpeando a los pobres y esto hará subir los precios de la energía y de los alimentos”, lamentó, mientras que los precios del barril de crudo, del gas licuado y de los cereales alcanzan máximos.