Con el pretexto de “mantener la paz”, en 2020 el gasto militar mundial se acercó a 2 billones de dólares (trillones en términos anglosajones), de los que alrededor de 40 por ciento correspondieron a las erogaciones de Estados Unidos, autonombrado “garante de la armonía mundial”. Ahora, dicho monto fácilmente se rebasará con el conflicto en Ucrania.
Según su informe más reciente ( Armamento, desarme y seguridad internacional 2021), el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés), calcula que en 2020 “el gasto militar mundial fue de un billón 981 mil millones de dólares, 2.6 por ciento mayor que en 2019 y 9.3 por ciento superior al de 2011. La carga militar mundial –gasto militar en proporción al producto interior bruto (PIB) mundial– creció hasta 2.4 por ciento, el mayor aumento desde la crisis financiera-económica mundial de 2009”.
El informe del SIPRI detalla que en 2020 el gasto militar aumentó por lo menos en cuatro de las cinco regiones: 5.1 por ciento en África; 4 en Europa; 3.9 en América y 2.5 en Asia y Oceanía. “Por sexto año consecutivo no se puede pro-porcionar un cálculo del gasto total en Oriente Medio”. Sin embargo, “el crecimiento estuvo muy influido por los patrones de gasto chino y estadunidense: éste aumentó por tercer año consecutivo, hasta sumar 778 mil millones de dólares, 4.4 por ciento más que en 2019. El gasto militar chino se calcula en 252 mil millones de dólares, 1.9 por ciento más que en 2019. “Dado que la economía china se recuperó bastante rápido de las restricciones pandémicas, es probable que el país sea de los pocos que pueda financiar un aumento continuado del gasto militar sin aumentar su carga militar”.
En tercera posición está India, con 72 mil 900 millones de dólares, 2.1 por ciento más que en 2019. Le sigue Rusia, 61 mil 700 millones de dólares, 2.5 por ciento más que el año previo, pero 6.6 por ciento menor al presupuesto inicial para 2020. En el escalón número cinco aparece Reino Unido, que incrementó su gasto militar 2.9 por ciento, “la segunda tasa de crecimiento anual más alta de esa nación en el periodo 2011-20”. Aun así, el gasto militar conjunto de esos cuatro países representa alrededor de la mitad del ejercido sólo por Estados Unidos.
Además, de acuerdo con el SIPRI, “el volumen de las transferencias internacionales de grandes armas en el quinquenio 2016-20 se situó casi en el mismo nivel que en 2011-15 y se mantuvo en su nivel más alto desde el fin de la guerra fría. Sin embargo, en 2016-20 siguió siendo 35 por ciento inferior al máximo alcanzado en 1981-85, en plena guerra fría. En general, la pandemia y la crisis económica resultante parecieron tener poco efecto en las entregas de armas en 2020 o en los nuevos pedidos de grandes armas durante el año”.
El citado instituto documenta que los cinco mayores proveedores de armas en el periodo 2016-20 fueron, es este orden, Estados Unidos, Rusia, Francia, Alemania y China, que juntos representaron 76 por ciento de las exportaciones. “Desde 1950, Estados Unidos y Rusia (Unión Soviética hasta 1991) han sido sistemáticamente los mayores proveedores”, aunque con matices. En el periodo 2016-20 las exportaciones estadunidenses de armas representaron 37 por ciento del total mundial y fueron 15 por ciento mayores a las registradas en 2011-15.”
Casi la mitad (47 por ciento) de esas exportaciones fueron a Oriente Medio en 2016-20. En cambio, las exportaciones rusas cayeron 22 por ciento y su proporción del total mundial se redujo de 26 por ciento en 2011-15 a 20 por ciento en 2016-20. Las de Francia crecieron 44 por ciento y las de Alemania 21 por ciento. Mientras las de China cayeron 7.8 por ciento. Los 25 principales Estados proveedores de armas representaron 99 por ciento de las exportaciones mundiales: América del Norte (Canadá y Estados Unidos) y Europa (incluida Rusia) significaron 86 por ciento de las exportaciones de armas. Los tres mayores proveedores de las otras regiones fueron China (5.2 por ciento del total), Israel (3) y Corea del Sur (2.7), en un negocio que rebasa 360 mil millones de dólares anuales. Las cinco primeras empresas exportadoras tienen sede en Estados Unidos. Desde luego, el armamento nuclear se cocina aparte (más de 13 mil ojivas).
Las rebanadas del pastel
Y esa es la brillante idea para mantener la “paz” en el mundo.